Algo que no se puede negar es que cada año las instituciones bancarias realizan importantes inversiones en sus áreas de tecnología y seguridad, y aún así hay espacios en los cuales la banca mexicana sigue atrás de otros países y en los que los clientes siguen esperando las innovaciones anunciadas años atrás y que todavía no vemos de forma masiva, sino de manera tímida, como son los cajeros automáticos con lectores biométricos.
El 29 de agosto de 2017 se publicó en el Diario Oficial la resolución que modifica la Circular Única de Bancos sobre robo de identidad, un año después se hicieron diversas modificaciones para darles mayores plazos de adopción y atendiendo las peticiones de los regulados. De ese año a la fecha ha habido cambios significativos como el hecho de que todos los bancos solicitan obligatoriamente las huellas digitales para aperturas de cuentas; en las aplicaciones móviles se avanzó en el reconocimiento facial y huella dactilar aprovechando la tecnología de los celulares. En fin, se han tenido avances, pero es en los cajeros automáticos en donde se hicieron anuncios de que se tendrían (ya algunos bancos han ido instalando algunos), pero es ATM con esta tecnología para reducir el fraude, que sigue en aumento en esa vía.
Mientras que en México se hablaba de usar biométricos al ir a un cajero, en Brasil en 2018, por ejemplo, ya al menos 90 mil ATM usaban tecnología biométrica y unos 60 mil tenían sensores de imágenes multiespectrales, siendo Itaú uno de los más avanzados en eso en aquellos años, cuando en nuestro país sigue siendo tarea pendiente.
Este año se vislumbra que se avanzará en la creación de la ‘identidad digital’ o la cédula única de identidad digital que tendrá de tarea la Secretaría de Gobernación y en el que los privados han hablado desde muchos años atrás, temas que podrían ir de la mano en el futuro y del que platicaremos pronto, pero lo cierto es que si bien la pandemia atrasó la puesta en marcha de muchos temas, el buscar incrementar la seguridad al retirar nuestro dinero en un cajero debería ser prioritario para toda la industria, ¿o no?
* * *
Y en el otro lado de la moneda, en los últimos años la transformación que ha tenido la empresa mexicana SuKarne la ha convertido en el centro de atención de la industria de los alimentos, y hoy queda más que demostrado al obtener el Premio Nacional de Exportación que le será entregado este jueves por la Secretaría de Economía.
Hace más de 25 años SuKarne comenzó a exportar sus productos y dado la cercanía, el primer país en el que comenzó a distribuir fue Estados Unidos, lo que permitió abrir la puerta hacia el exterior y comenzar su expansión, hoy realiza ventas a Cuba, Canadá, Chile, Costa de Marfil, Egipto, Gabón, Ghana, Liberia, Panamá, Rusia, Japón y China con lo cual ha logrado tener presencia en cuatro continentes, por lo que ya es el quinto proveedor de carne de res en Norteamérica y el tercer engordador de ganado bovino en el mundo.
El premio que recibe este día se otorga a empresas que aseguran el suministro, la calidad y la innovación para clientes y consumidores finales. Hasta 2020, el 34 por ciento de los ingresos de SuKarne provenían de exportaciones y la compañía tiene 66 por ciento del total de exportaciones de carne bovina nacional y más de 14 mil colaboradores. Sin duda una de las empresas mexicanas que va marcando su paso en todo el mundo. Felicidades a todos. Por lo pronto, la moneda está en el aire.