Moneda en el Aire

Se buscan emprendedores tecnológicos

En México ya se tienen más de 100 fondos de capital privado que apoyan emprendimientos de tecnología financiera.

Si algo tienen claro los venture capital o capital de riesgo, es que México cada vez está más cerca de superar a otros países de América Latina por la gran variedad de empresas de tecnología financiera y de todo tipo que están creándose en estas tierras y que tienen el potencial para rebasar fronteras, si cuentan con el apoyo adecuado.

Pero no solo eso, la posición estratégica del país también hace que empresas de tecnología financiera nacidas en otras naciones vengan a México a buscar nuevas oportunidades de crecimiento, por lo que hay una gran variedad de opciones en la que los grandes inversionistas pueden apostar su dinero, por lo que la competencia está en su apogeo.

Para ser vistos por los inversionistas internacionales, hay varios temas claves que los emprendedores deben saber, considera una de las expertas más reconocidas en el mundo de las inversiones, Liliana Reyes, directora de Amexcap y una especialista en capital privado y cooperación internacional; un punto a destacar es que las grandes empresas que invierten buscan a emprendedores que tengan no solo buenas ideas o un negocio potencial, sino que hayan tenido una experiencia previa, por ejemplo, en grandes empresas, es decir hayan trabajado ya en una corporación ‘tradicional’.

Si ya pusieron en marcha una idea interesante y ya es un emprendimiento exitoso, bien implementado y con un crecimiento fundamentado, que no se convertirá en un problema futuro de no saber cómo dar respuesta a la demanda de servicios o productos que pudieran tener, es muchas veces producto de la experiencia que dan las grandes y hoy criticadas corporaciones, sean bancos o corporativos, lo que les permite a los emprendedores resolver muchos de los problemas futuros de manera más innovadora. ¿Qué tal?

Un vistazo a muchos de los currículos de los grandes emprendedores, hoy con unicornios en potencia, es que trabajaron en el mundo corporativo de instituciones financieras o grandes empresas y que después saltaron a ser independientes y pusieron en marcha sus negocios.

En México, dado que solo 40 por ciento de la población esta bancarizada, para las empresas fintech hay una gran oportunidad de ser vistas y atraer inversiones o, lo que es lo mismo, obtener financiamiento por la vía de los fondos de inversión. El mes pasado que hubo un encuentro en Miami, por ejemplo, se vio un boom del venture capital; en México ya se tienen más de 100 fondos de capital privado que apoyan a este tipo de emprendimientos, en la región suman más de 250 y todo indica que 2022 será el año más competido y con más empresas de tecnología financiera despegando, ya veremos quienes lo logran.

* * *

Y en el otro lado de la moneda, muy activo anda el equipo de Daniel Bandle, de Axa Seguros, que se ha enfocado exitosamente a dar servicios a las aplicaciones de transporte privado, como Uber, Didi, Cabify, Beat, Easy Taxi ya que junto con inter.mx han lanzado dos nuevos productos diseñados específicamente para proteger al usuario y el auto de los conductores de estas aplicaciones.

Según el análisis de riesgos para vehículos realizado durante 2020 por Axa Seguros, la cifra promedio por daños en accidentes de auto asciende a 18 mil pesos, que aunque pareciera poco, en realidad para un prestador de servicios independiente puede significar la pérdida temporal o total de su fuente de ganancias, de ahí la importancia de tener un seguro cuando estén activos en la aplicación; una buena opción para estos trabajadores.

* * *

Otra monedita positiva es para los socios de la Asociación Mexicana de Entidades Financieras Especializadas (AMFE) que refrendaron la confianza en Enrique Bojórquez a quien reeligieron un año más como su presidente; la asociación tiene a las Sofomes más grandes del país con alrededor de dos millones de clientes, y una cartera superior a 430 mil millones de pesos, y para el próximo año esperan crecer más de la mano de la banca de desarrollo, ya veremos si se logra. Por lo pronto, la moneda está en el aire.

COLUMNAS ANTERIORES

Futuro incierto con aranceles recíprocos
El sueño de los trenes de pasajeros

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.