La llegada de una empresa extranjera expendedora de gasolina y diésel al norte del país —específicamente a Torreón, Coahuila— ha detonado manifestaciones de grupos empresariales y sectores sociales, quienes señalan presuntos actos de corrupción y la mala calidad del combustible que ahí se comercializa.
En la carretera Torreón–San Pedro, en las fracciones 4,5 y 7 del Ejido La Unión, se construyó una gasolinera de Costco Gas que abrió sus puertas al público el 14 de noviembre de 2024, aun cuando la obra no estaba concluida. Lo relevante es que comenzó a despachar sin contar con los permisos federales que habitualmente tardan de uno a dos años en otorgarse.
Aun así, Costco Gas inició sin la Autorización de Inicio de Operaciones de la Comisión Nacional de Energía (CNE) ni la Autorización de Evaluación del Estudio de Impacto Social de la Secretaría de Energía (Sener).
Son permisos esenciales para operar legalmente y garantizar condiciones mínimas de seguridad para los consumidores. De acuerdo con fuentes cercanas, la estación recibe diariamente a los usuarios sin el aval de las autoridades regulatorias, lo que deja al descubierto posibles actos de corrupción y violaciones al marco legal administrativo, fiscal y penal.
Las gasolineras deben reportar a la autoridad sus compras, ventas y la procedencia lícita del combustible. Sin permisos, esta estación no registra adecuadamente sus operaciones, lo que abre la puerta a supuestos de evasión fiscal y opacidad en el origen del combustible que comercializa. A lo cual deben ser revisadas todas las estaciones de servicio, pero que se complica por el tamaño del mercado, vaya, faltan manos por parte de las autoridades.
A ello se suma una autorización ambiental expedita que no corresponde a la superficie ni al proyecto real, lo cual le habíamos comentado en entregas anteriores en este mismo espacio.
Por esta razón, la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), encabezada por el Armando Ocampo Zambrano, debería imponer sanciones, multas e incluso clausuras, como se ha venido haciendo con muchas otras gasolineras en todo el país, conforme al Registro Nacional de Instalaciones de Gasolinas y Gas LP (RENAGAS), pues la gasolinera incumple disposiciones obligatorias que sí se exigen al resto del país.
Todas estas irregularidades evidencian que Costco Gas goza de protección de autoridades que le permiten operar sin ser molestada, pese a violar leyes, normas y reglamentos. Es alarmante que la seguridad y calidad del combustible no estén siendo revisadas con rigor,
poniendo en riesgo a los consumidores y dejando en desventaja a las empresas mexicanas que sí cumplen con cada autorización para operar legalmente.
EQUIDAD EN CANACAR
La contienda por la dirigencia de la Canacar está develando un debate sobre neutralidad e igualdad. Transportistas señalan que la Concamin, encabezada por Alejandro Malagón, está dando un trato VIP al aspirante impulsado por el líder saliente Miguel Ángel Martínez Millán, al regio Ramiro Montemayor, cuya constante aparición en eventos del organismo cúpula, genera dudas por tanto placeo. No sería la primera vez que surge esta percepción; meses atrás se comentó que Concamin habría inclinado la balanza por José Manuel Urreta en la Cameintram. En la contienda del transporte, participan Augusto Ramos y Rómulo Mejía, cada uno buscando libremente sumar apoyos . En este entorno, el reclamo central es firme: equidad para todos.