Luego de la desastrosa gestión de Manuel Bartlett Díaz en la CFE, ahora con Emilia Esther Calleja se ha reorientado el rumbo de la Comisión Federal de Electricidad hacia horizontes más sustentables e incluyentes.
Esto permitirá generar energías limpias a precios accesibles para el grueso de la población con subsidios relevantes (85 mil millones de pesos en este año). Además, se busca capacidad de generación y transmisión del fluido eléctrico que atienda la demanda presente y futura.
La funcionaria compareció ante integrantes de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, que preside la diputada morenista Rocío Adriana Abreu, con motivo de la glosa del Primer Informe de Gobierno de Claudia Sheinbaum.
En su informe, Calleja advirtió que la Empresa Pública del Estado está en un momento de transición y transformación profunda. Esto se debe a que las leyes aprobadas en la materia representan un parteaguas en el manejo de la ampliación de los temas de energía en el país. Además, explicó que la CFE es quien más energía limpia produce en México.
Para el 2030 se habrá incrementado en más de 22 mil megawatts la capacidad a través de centrales térmicas y de energías limpias, lo que fortalecerá la confiabilidad del sistema y garantizará la energía para los sectores productivos y millones de familias mexicanas.
Sobre la transición energética, la titular de la CFE dijo que en el periodo de enero-agosto de 2024 contra enero-agosto de 2025 hubo una reducción de 5.37 millones de toneladas de CO2.
Además, se incrementó la generación hidroeléctrica con los programas de modernización y rehabilitación de las centrales. Esto permitió 13.2 gigawatts hora en el 2024 y 16.4 en 2025. Al mismo tiempo, se ha reducido el consumo de combustóleo en 14 mil 555 metros cúbicos.
La nueva naturaleza jurídica de la empresa dio viabilidad al desempeño financiero. Al segundo trimestre de 2025, los ingresos de la Comisión Federal llegaron a 340 mil millones de pesos, impulsados por un incremento en venta de energía, combustibles a terceros y transporte. El resultado neto fue de 68 mil 691 millones de pesos.
Este año se han destinado 84 mil 805 millones de pesos para apoyar las tarifas domésticas, beneficiando a cerca del 89 por ciento de los usuarios de tipo residencial.
Todo esto con un subsidio promedio del 47 por ciento en su factura —varía según los criterios de zona y la temporada—. Además, representa un apoyo para la economía de millones de familias.
La titular de la CFE recordó que la población no resiente en su bolsillo el impacto de los aumentos a los combustibles y se espera que las tarifas eléctricas suban igual o menos que la inflación.
Los diputados de oposición no desperdiciaron la oportunidad de cuestionar a la funcionaria en torno a los apagones ocurridos hace unas semanas en la península de Yucatán que dejaron sin luz por varias horas a tres entidades.
Al respecto, la priista Lorena Piñón Rivera mencionó que en septiembre la península sufrió durante horas un apagón masivo y en lo que va del año han ocurrido otros, por lo que es relevante saber las causas de esas fallas recurrentes.
En su turno, Hernando Castañeda Córdova, del blanquiazul, manifestó que México atraviesa una crisis eléctrica respecto a apagones, cortes de energía, caídas del sistema y denuncias constantes de expertos y urgió que se presente un calendario de inversión y mantenimiento con reportes trimestrales y verificación pública.
Por su parte, la diputada Patricia Flores Elizondo, de Movimiento Ciudadano, estimó que el acceso a la electricidad es un tema de justicia social, equidad territorial y de transición energética.
Sin embargo, la expansión de la red no llega a donde más se necesita y México continúa anclado a los combustibles fósiles. Además, existe electrificación desigual y rezagos históricos.
Actualmente, el 80 por ciento de la generación eléctrica de CFE proviene de combustibles fósiles y apenas el 18 por ciento de fuentes renovables.
En 2024, informó Calleja, se tuvo un margen de reserva operativa de 10.81 por ciento, el cual garantiza que la energía está disponible para cualquier emergencia, y en promedio en 2025 ha sido del 14 por ciento y 13.74 por ciento.
Especificó que el pasado 9 de junio fue el día de máxima demanda, y la reserva operativa ascendió a 9.69 por ciento; es decir, energía hay, tenemos suficiente para atender el requerimiento del consumo que está programado, dijo.
Veremos si esto es cierto o si solo se quedará en buenos deseos lo expresado por los funcionarios de la 4T.