Desde San Lázaro

En emergencia por la inseguridad pública

Omar García Harfuch reafirmó su compromiso de avanzar cada año en la pacificación del país y sostuvo que el balance del primer año de la administración es favorable en comparación con el inicio del periodo.

La ola de violencia e inseguridad pública que azota buena parte del territorio nacional va en aumento, pese a que ahora sí se combaten a los criminales.

A diferencia de lo que sucedió durante la administración de López Obrador, cuando los grupos delincuenciales crecieron exponencialmente en el país, tomando el control de vastas regiones.

La estrategia del sexenio pasado de “abrazos, no balazos” significó la claudicación del Estado en su responsabilidad de proteger la vida, los derechos humanos y el patrimonio de los mexicanos.

Obviamente, un año no es suficiente para resolver el embrollo que AMLO dejó a su sucesora en materia de seguridad. A pesar del excelente trabajo de las fuerzas del orden, encabezadas por el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch; el titular de la Sedena, general Ricardo Trevilla Trejo; y el almirante Raymundo Morales Ángeles, de la Marina.

Los asesinatos de alto impacto, como el del líder limonero, Bernardo Bravo, echan al traste cualquier triunfalismo y dejan claro que continuamos en una situación de emergencia.

Durante la comparecencia de Omar García Harfuch en el Senado de la República, quedó claro que la inseguridad persiste. No hay resultados positivos a corto plazo que le devuelvan la tranquilidad y protección a la ciudadanía.

Y eso ocurrirá solo cuando se detengan a los delincuentes generadores de violencia, narcoterroristas y toda clase de bichos que crecieron al cobijo de la 4T.

El titular de la SSPC federal acudió a la Cámara alta para explicar y justificar por qué no se han cercenado todos los tentáculos del crimen organizado. Mientras bajan algunos delitos de alto impacto como el de homicidio doloso, suben otros, como las extorsiones y desapariciones.

El gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum está siendo atacado por dos frentes. Uno es la inseguridad pública a nivel nacional. El otro es la enorme presión de la Casa Blanca para acabar con los narcoterroristas mexicanos.

Estos no solo son un cáncer que ya hizo metástasis en el territorio nacional, sino que amenazan la seguridad nacional de Estados Unidos con el trasiego de drogas sintéticas, principalmente de fentanilo.

En este contexto, durante la comparecencia de García Harfuch, si bien los legisladores reconocieron el trabajo realizado, también se reiteró que falta mucho por hacer, en donde todos, en especial el Poder Legislativo, tienen un alto grado de responsabilidad en la ardua tarea de apaciguar al país.

En su exposición, el funcionario destacó que hay una reducción en homicidios dolosos a nivel nacional. “La ciudadanía debe saber que hay 27 homicidios menos diarios, un 32 por ciento menos de homicidios y una cantidad sin precedentes de drogas, armas y más de mil 500 laboratorios destruidos por el Ejército y la Marina”, puntualizó.

Esta disminución se acompaña de logros operativos sin precedentes: el aseguramiento de grandes cantidades de drogas y armas, así como la destrucción de más de mil 500 laboratorios clandestinos por elementos de la Sedena y la Semar.

La estrategia del gobierno de la presidenta Sheinbaum se conforma de cuatro etapas y se basa en la coordinación diaria entre el Gabinete de Seguridad y las entidades federativas. Esta articulación ha permitido ejecutar operativos conjuntos, detener objetivos prioritarios y desarticular células delictivas.

En cuanto al combate al huachicol fiscal, desde marzo se han asegurado millones de litros de diésel en operativos que han derivado en órdenes de aprehensión cumplimentadas.

El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana aseguró que este modelo de investigación y ejecución se replicará en todos los casos, y que mes con mes se registran detenciones relevantes que evidencian la continuidad de la estrategia.

Al cierre de su intervención, García Harfuch reafirmó su compromiso de avanzar cada año en la pacificación del país y sostuvo que el balance del primer año de la administración es favorable en comparación con el inicio del periodo.

Cierto, ante la carencia de mediciones se diluyen los resultados, aun siendo positivos. Por ello, la retahíla de cifras en la comparecencia por parte del titular de la SSPC fue abrumadora.

Aunque, como ya se explicó, falta mucho para lograr la pacificación, consolidar la reducción de delitos y la desarticulación de estructuras criminales.

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