CUAUTLA.- La Fiscalía General de Justicia del Estado de Morelos determinó imputar a la exdirectora de Servicios Periciales, Ana Lilia Guerrero Moreira, como única responsable de la inhumación de más de cien cadáveres en dos fosas irregulares ubicadas en el poblado de Tetelcingo.
La fiscal María Elena Luenga Páez formuló la acusación imputación en contra de Guerrero Moreira por los delitos de uso de documentación falso; contra el respeto a los muertos y violación a las leyes de inhumación y exhumación de cadáveres.
Lo anterior debido a que no se cumplieron los protocolos establecidos para la inhumación de 119 cadáveres desconocidos, entre ellos el cuerpo de Oliver Wenceslao Navarrete Hernández, Zenaida Flores Bolaños e Israel Hernández Torres, víctimas de secuestro.
La Fiscalía solicitó al juez la prisión preventiva en contra de la exfuncionaria al argumentar que existe el riesgo de que la persona imputada no compareciera a las audiencias posteriores.
Según la dependencia, y de acuerdo al peritaje de Juan Carlos Plata Guzmán, se estima que el daño ocasionado a las víctimas sería de más de 38 millones de pesos; aunado a que la persona imputada no cuenta con un arraigo domiciliario en el estado.
En respuesta, el abogado Juan Manuel Cuellar Miranda dijo que la medida cautelar solicitada era desproporcional pues así lo establece el artículo 19 de la Constitución Mexicana, y la situación domiciliaria ya había sido justificado.
Tras el debate, el juez resolvió imponer las siguientes medidas cautelares: supervisión personal, una vez al mes ante la Unidad de Medidas Cautelares y Salidas Alternas para Adultos (UMECA), y la prohibición de salir del estado y el país.
También fijo el 10 de diciembre para el desahogo de la audiencia de vinculación a proceso y conocer si existen elementos suficientes en contra de Ana Lilia Guerrero para ser sometida a un proceso penal por los probables delitos en su contra.
Cabe mencionar que desde que se conoció del asunto, el gobierno de Morelos y la Fiscalía General sostuvieron que las fosas de Tetelcingo no eran clandestinas ni irregulares, pero en la formulación de imputación
dice que "la inhumación de los 119 cuerpos se efectuó en un panteón irregular, donde la imputada utilizó documentos de tipo público falsos para justificar su actuar", según se menciona en un comunicado.