La diputada Hilda Brown negó haber colaborado con el Cártel de Sinaloa, específicamente con la facción de ‘La Mayiza’.
A pesar de las acusaciones en su contra, la presidenta Claudia Sheinbaum negó que las cuentas de la legisladora hayan sido congeladas por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos señaló nexos criminales de la diputada de Morena cuando fue alcaldesa de Rosarito, Baja California, pero la funcionaria dijo que el objetivo de esta medida es “desacreditarla”.
¿Cuál fue su papel dentro del Cártel de Sinaloa según las acusaciones? Esto es lo que debes saber sobre la funcionaria:
¿Quién es Hilda Araceli Brown?
Hilda Araceli Brown Figueroa es una diputada federal por el partido Morena y exalcaldesa de Playas de Rosarito, Baja California, entre 2021 y el año pasado.
Su trayectoria política ha estado marcada por su participación activa en la promoción de movimientos políticos, incluyendo la consulta para cancelar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México en 2018.
A pesar de tener un perfil público activo, su carrera se ha visto empañada por acusaciones de vínculos con el Cártel de Sinaloa.
¿Qué acusaciones enfrenta Hilda Araceli Brown?
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha incluido a Hilda Brown en una lista de 22 individuos y empresas cuyos bienes han sido congelados en Estados Unidos
Las acusaciones la vinculan con la facción conocida como ‘La Mayiza’, liderada por los hermanos Alfonso y René Arzate, quienes han sido identificados como jefes de plaza del Cártel de Sinaloa en Baja California. Las autoridades estadounidenses sostienen que Brown, junto con otros, facilitó el lavado de dinero y la extorsión a favor de esta organización criminal.
¿Cuál fue su papel en el Cártel de Sinaloa durante su gestión como alcaldesa?
Durante su mandato como alcaldesa, Hilda Brown fue acusada de permitir que Candelario Arcega Aguirre, un operador político del Cártel de Sinaloa, ejerciera control sobre el gobierno municipal.
Según el Departamento del Tesoro, Arcega utilizó su relación con Brown para colocar a sus aliados en posiciones de poder dentro del gobierno local.
Juntos, habrían recaudado pagos de extorsión y garantizado la protección de las actividades delictivas de los hermanos Arzate por parte del Departamento de Seguridad Pública de Rosarito.
Hilda Brown rechazó enérgicamente las acusaciones en su contra, calificándolas de infamia y afirmando que no ha recibido notificación oficial sobre el bloqueo de sus cuentas.
En sus declaraciones, ha manifestado que está dispuesta a colaborar con las autoridades y que su compromiso siempre ha sido con la lucha contra la corrupción. A pesar de las sanciones, Brown ha mantenido que su carrera política no se verá afectada por estos señalamientos.
Las sanciones impuestas por el Departamento del Tesoro al Cártel de Sinaloa tienen implicaciones significativas. La congelación de bienes en Estados Unidos de individuos y empresas vinculadas al Cártel de Sinaloa busca debilitar la capacidad operativa de esta organización.
Esto incluye la prohibición de cualquier transacción financiera y la obligación de reportar cualquier bien o propiedad en posesión de ciudadanos estadounidenses. La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) también ha comenzado a investigar las cuentas de los implicados.
El futuro de Hilda Araceli Brown en la política dependerá en gran medida de cómo se desarrollen las investigaciones en su contra y de su capacidad para desvincularse de las acusaciones del Departamento del Tesoro.
Si bien ha afirmado que no tiene cuentas bloqueadas y que no ha recibido notificaciones, el escrutinio público y las implicaciones legales podrían tener un efecto duradero en su carrera.