Los líderes occidentales coincidieron el martes en que estarán listos para imponer más sanciones contra Rusia si la crisis empeora, dijo un portavoz alemán, y Francia afirmó que todos estuvieron de acuerdo en que será necesaria una "reacción firme" si no se respeta el cese al fuego alcanzado el mes pasado.
Las declaraciones de ambos Gobiernos se dieron luego de una videoconferencia entre los líderes de Estados Unidos, Alemania, Francia, Gran Bretaña e Italia, así como el jefe del Consejo Europeo, en la que discutieron la crisis ucraniana y temas globales de seguridad.
Steffen Seibert, portavoz de la canciller alemana, Angela Merkel, dijo que los líderes enfatizaron que la implementación del acuerdo de Minsk y las sanciones existentes contra Rusia estaban estrechamente ligados.
"Esto significa que las sanciones pueden ser levantadas solo si el acuerdo de Minsk se implementa por completo. Al mismo tiempo, confirmaron que estaban preparados para aprobar mayores sanciones en el caso de una nueva escalada" de la crisis, agregó.
Desde Bruselas, la Unión Europea se hizo eco de las declaraciones de Alemania y Francia y dijo en un comunicado que "los líderes estarán preparados para decidir sobre nuevas sanciones, si los acuerdos de Minsk no se siguen respetando".
La reunión virtual se dio en momentos de continua violencia en Ucrania pese a un acuerdo de dos semanas de un cese al fuego, mientras los líderes sopesan el rol de observadores y soldados de paz y la posibilidad de más sanciones contra Rusia por apoyar a los separatistas ucranianos.
Estados Unidos dijo también que está considerando la posibilidad de enviar armas defensivas a Kiev.
La oficina del presidente francés, Francois Hollande, dijo en un comunicado que las partes reiteraron su apoyo al acuerdo de Minsk.
"Coincidieron en que será necesaria una reacción firme de la comunidad internacional en el caso de una violación grave al proceso que comenzó en Minsk", según el comunicado.
También dijo que los líderes querían reforzar los recursos de los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) para supervisar la tregua.
Ucrania y los gobiernos occidentales han acusado a Rusia de enviar tropas y armamento para los rebeldes en el este del país pese a la tregua alcanzada el 12 de febrero. Moscú niega estar ayudando a los separatistas.
El martes, Kiev anunció el mayor número de muertos en varios días de conflicto. Tres soldados ucranianos fallecieron y nueve resultaron heridos en medio de bombardeos de los rebeldes.
Líderes europeos dijeron el lunes que habían coincidido en que la OSCE necesitaba un mayor papel como observador del cese al fuego y la remoción de armamento.
Estados Unidos y Europa ya han impuesto sanciones a Rusia por sus acciones en Ucrania, tras la anexión de la península de Crimea.