Reuters
Brasilia.- El primer ministro de Rusia, Dmitry Medvedev, se reunió el miércoles con la presidenta Dilma Rousseff durante una visita a Brasil que tiene como objetivo negociar la venta de equipo de defensa y tecnología nuclear a su socio del bloque BRICS de mercados emergentes.
En la agenda se incluye una posible venta a Brasil de sistemas rusos de misiles antiaéreos, dijo un portavoz del gobierno brasileño.
Brasil busca fortalecer sus defensas aéreas antes de la celebración de la Copa Mundial de Fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos en el 2016 para protegerse contra la amenaza de algún ataque terrorista durante esos eventos deportivos, a los que asistirán miles de extranjeros.
El viaje de Medvedev sigue a una visita que hizo Rousseff a Moscú en diciembre, lo que destaca la importancia que ambos países dan al estrechamiento de relaciones entre los miembros de las economías emergentes del BRICS.
Los países del BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- tienen un PIB combinado de 14.9 billones de dólares y tienen cada vez una mayor voz en las críticas sobre el manejo de las políticas económicas globales por parte de los países desarrollados.
Los lazos entre Brasil y Rusia se han fortalecido y ambos quieren elevar el comercio anual a 10,000 millones de dólares desde los actuales 6,500 millones de dólares.
Moscú promocionará su avanzada experiencia energética y tecnología buscando involucrarse en los planes de Brasil para la construcción de nuevas centrales de energía nuclear para satisfacer la creciente demanda por electricidad que ha saturado su capacidad de generación.
"Nos gustaría ofrecer nuestra participación en la construcción de plantas nucleares y nos gustaría ser invitados a participar en la (próxima) licitación", dijo un importante funcionario de la delegación rusa.
Agregó que Rusia podría capacitar al personal nuclear de Brasil, diseñar reactores de investigación y abastecer de combustible a las futuras plantas.
Medvedev tratará también de cerrar la venta de tecnología de misiles antiaéreos de Rusia, incluyendo su sistema combinado de misiles y artillería Pantsir S1 y el Igla-S de lanzadores portátiles de misiles tierra-aire.
Brasil está interesado en comprar 3 baterías Pantsir con misiles de mediano alcance y quiere obtener tecnología para construir sus propios misiles en el futuro.
"Ya hemos firmado un protocolo comercial para el suministro del Igla-S, que también considera las oportunidades de la producción bajo licencia, pero las negociaciones están en marcha. El lanzamiento de la producción bajo licencia puede tomar cierto tiempo, por lo que, mientras tanto, han expresado interés en importar el Igla-S", dijo el funcionario ruso.
Rusia es el segundo mayor exportador de armas en el mundo y una negociación con Brasil sería ampliamente vista como la penetración simbólica en el mercado de defensa latinoamericano, después que Rusia perdió algunos contratos importantes en el Oriente Medio debido a los levantamientos conocidos como la Primavera Árabe.
Medvedev discutirá también el posible incremento del suministro de carne brasileña a Rusia, su mayor comprador, pero las autoridades sanitarias de Moscú buscarán asegurarse de que cumplan con todas las normas necesarias.
En una señal de que ambos países avanzan en su acercamiento, Brasil se convirtió el martes en el primer país fuera de Rusia en tener una estación de monitoreo del sistema ruso de navegación satelital GLONASS, un sistema de posicionamiento global que utiliza 24 satélites.