Reuters
Existe creciente evidencia de que la guerra contra las drogas encabezada por Estados Unidos ha fallado, con la criminalización creando a menudo más problemas de los que soluciona, dijo Helen Clark, jefa del Programa de Desarrollo de la Organización de las Naciones Unidas.
Clark dijo que los líderes latinoamericanos deberían ser motivados a desarrollar diferentes políticas para enfrentar el problema con las drogas.
"He sido ministra de salud en el pasado, y no hay duda de que la postura saludable sería tratar el asunto de la drogas como un tema social y de salud, en vez de criminalizarlo", dijo Clark.
"Claro que nuestro mundo ha actuado sobre las bases de que la criminalización es la forma", explicó.
Clark no dio una receta para los gobiernos latinoamericanos, pero dijo que deberían "actuar sobre las evidencias", destacando que ella favorece lidiar con el asunto como un problema de salud pública.
En los últimos años, varios gobiernos de la región han comenzado a cuestionar abiertamente la ortodoxa "guerra contra las drogas" liderada por Estados Unidos desde hace 40 años, que busca acabar con el cultivo y distribución de drogas como la marihuana y la cocaína.
Frustrados por el incesante baño de sangre y la percepción de que Estados Unidos no ha hecho lo suficiente para disminuir su consumo de drogas, muchos líderes regionales hablan ahora abiertamente de la posibilidad de la legalización.
Sólo en México, más de 70,000 personas han muerto por la violencia del narcotráfico desde inicios del 2007.
Con el apoyo de Estados Unidos, el ahora ex presidente Felipe Calderón, quien dejó el cargo en diciembre, lanzó una ofensiva militar a finales del 2006 contra los cárteles.
Pero en lugar de contener la violencia, los asesinatos siguieron en aumento.
En la asamblea general de la ONU de septiembre, Calderón y los presidentes de Colombia y Guatemala -tres de los aliados más confiables de Estados Unidos en el combate al narcotráfico- llamaron a los líderes del mundo a explorar nuevas alternativas para lidiar con el problema.
Clark destacó que ese tipo de llamados han ido en aumento en Latinoamérica y otras partes del mundo.
"El acercamiento que se ha tenido ha fallado, así que necesitamos una mirada fresca. Creo que el debate que se está dando a nivel regional es muy útil", explicó.
"Tenemos oleadas de crímenes violentos financiados por el comercio de drogas, así que debemos retirar el dinero a las drogas", agregó.