"Me enteré cuando vi la noticia en la televisión. Decidí entrar al Facebook de mi amigo el guía, Mabil Altamawi, un gran amigo, y fue cuando encontré un mensaje de condolencias. No lo podía creer", relata Araceli Rangel Dávalos, tía de Rafael Bejarano, quien murió en el ataque a turistas mexicanos en el desierto egipcio de El-Wahat.
Rangel es hermana, de Maricela Rangel, madre del Rafael, quien se encuentra entre los heridos en el hospital Dar El-Fouad.
Cuenta que al enterarse de la tragedia, se puso de inmediato en contacto con las autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores, quién a pesar de que no han hecho oficial la muerte del músico y chamán de 41 años, le brindaron todo su apoyo.
Me puse en contacto con las autoridades y me han dado un gran apoyo, no han dejado de ayudarme, de resolverme dudas, no tengo más que agradecimiento. No esperaba ese trato
Con la voz entre cortada, Rangel cuenta a El Financiero que quienes le aseguraron que su sobrino había muerto "son amigos que tengo en Egipto, ellos me lo dijeron. Ya solo falta que el gobierno de Egipto concluya con la identificación".
Indicó que "no puedo decir si se trató de un error, no lo sé; yo había hecho nueve viajes con Mabil y siempre nos cuidó, nos procuró, a ojos cerrados íbamos. Era una persona muy meticulosa, un egiptólogo extraordinario y reconocido, me duele mucho su muerte".
Señaló que "ha sido un día muy pesado, un día terrible; sólo espero poder hablar con mi hermana".
