BEIRUT.- El Ejército sirio recapturó la antigua ciudad de Palmira, dijeron medios estatales y un grupo activista, en una ofensiva que podría dejar el control de vastas zona del país a las fuerzas del gobierno.
La recuperación de Palmira, que quedó bajo el control de militantes islamistas en mayo del 2015, marcaría el mayor avance para el presidente Bashar al-Assad desde que Rusia intervino en septiembre y cambió a su favor la balanza del conflicto, que ya lleva cinco años.
En Palmira se hallan algunas de las ruinas más grandes que datan del antiguo imperio romano. ISIS dinamitó templos y tumbas desde que capturó la ciudad, hechos que la agencia patrimonial de Naciones Unidas, la UNESCO, calificó como crímenes de guerra.
La ciudad controla las rutas en dirección al corazón del territorio en manos de los milicianos, que han proclamado un "califato" para gobernar a los musulmanes desde partes de Siria e Irak.
Aviones de combate rusos continuaron apoyando al Ejército sirio y a sus aliados, como parte de la ofensiva militar sobre la ciudad, pese al reciente anuncio de Moscú de que retiraría buena parte de sus fuerzas militares de Siria.
La televisión estatal y Al-Manar, el canal del grupo libanés Hezbollah, citaron a fuentes militares diciendo que las fuerzas del gobierno habían capturado la ciudadela, ubicada frente a las antiguas ruinas.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, confirmó que la ciudadela fue recuperada. Dijo que entre el amanecer y las primeras horas de la tarde del viernes se registraron 56 ataques aéreos.
Un oficial de las fuerzas especiales rusas murió en los combates cerca de Palmira la semana pasada, informó la agencia Interfax, lo que sugiere que el Kremlin está mucho más involucrado en la guerra de Siria de lo que reconoce públicamente.