Hace 13 años, un grupo reducido de miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) dejó las armas por los teléfonos y comenzó una red de fraudes de tiempos compartidos en Puerto Vallarta, Jalisco.
Los centros de atención telefónica controlados por el crimen organizado contactan a las víctimas por llamadas o correos electrónicos y se hacen pasar por corredores, abogados o representantes de ventas de inmuebles de tiempo compartido con sede en Estados Unidos.
De acuerdo con el gobierno de Trump, uno de los líderes detrás de las estafas es Julio César Montero Pinzón, alias “El Tarjetas”, quien fue acusado en EU este 22 de septiembre de fraude electrónico y lavado de dinero.
“El Tarjetas” y su hermana estafan a extranjeros de la tercera edad
El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó cargos contra Montero y su media hermana, Griselda Margarita Arredondo Pinzón, por fraude electrónico y lavado de dinero.
Ambos fueron acusados en un informe que destaca la naturaleza internacional del esquema. Montero también enfrenta cargos por proporcionar apoyo material al CJNG, lo que añade un nivel de gravedad a las acusaciones.
¿Cómo funcionaba el esquema de fraude de tiempos compartidos?
El esquema de fraude operado por el CJNG se basa en engañar a propietarios de tiempos compartidos en diversas ciudades de Jalisco, México.
Las víctimas son contactadas y se les solicita un pago por adelantado para vender o alquilar sus propiedades, con la promesa de que recibirán el dinero más tarde. Sin embargo, muchas de estas personas terminan siendo contactadas nuevamente por supuestos abogados que exigen más dinero para recuperar sus fondos, lo que agrava la situación de fraude.
¿Quién es “El Tarjetas” y qué papel juega en el CJNG?
Julio César Montero Pinzón, “El Tarjetas” y/o “Moreno” y “El Chess”, es un alto miembro del CJNG.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Montero ha sido una figura clave en la operación de un esquema de fraude con tiempos compartidos dirigido a ciudadanos estadounidenses. Este esquema se ha estado ejecutando desde al menos 2012 y ha generado un impacto significativo en las víctimas, quienes han sido engañadas a través de promesas fraudulentas.