Durante su visita a México, Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, lanzó una advertencia directa contra los grupos criminales considerados como organizaciones terroristas por las autoridades estadounidenses: “Los cárteles no van a seguir operando con impunidad”.
‘En la mira’ de Estados Unidos están dos de las principales organizaciones criminales de México: el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación, cuyo control se ha extendido a diversos países de América Latina.
Entre esas naciones se encuentra Ecuador, país que Marco Rubio visitará próximamente y que atraviesa una crisis de violencia provocada por la disputa territorial entre ‘Los Choneros’ y ‘Los Lobos’, dos bandas criminales que tienen vínculos con los principales cárteles mexicanos dedicados al tráfico de drogas.
¿Quiénes son ‘Los Choneros’ y quién los lidera?
Los Choneros surgieron a inicios de los años 2000 en el cantón Chone, en la provincia de Manabí, Ecuador. Bajo el liderazgo de Jorge Luis Zambrano, alias ‘Rasquiña’, el grupo evolucionó de ser una banda dedicada a los asesinatos por encargo a convertirse en una estructura criminal con influencia en todo el país.
Su consolidación ocurrió tras la captura de Zambrano en 2011, cuando fue enviado a la prisión de máxima seguridad de La Roca, junto con su lugarteniente principal, José Adolfo Macías, alias ‘El Fito’.
Ambos líderes criminales se enfocaron con el tiempo en fortalecer a ‘Los Choneros’ mediante alianzas dentro de los reclusorios, donde integraron a bandas de ladrones, extorsionadores y microtraficantes, así como a facciones de pandillas como ‘Los Ñetas’ y ‘Los Vatos’.
Estas alianzas facilitaron la rápida expansión de ‘Los Choneros’ en zonas estratégicas para el tráfico de drogas, como los puertos de Manta y Guayaquil. Desde ahí, establecieron acuerdos con el Cártel de Sinaloa para movilizar cargamentos de cocaína desde Ecuador hacia Estados Unidos y Europa.
Su poder se mantuvo firme incluso después del asesinato de ‘Rasquiña’, en diciembre de 2020, aunque ese hecho marcó el inicio de su fragmentación.
Con la muerte del líder, la organización se dividió y dio origen a otros grupos como ‘Los Lobos’ y ‘Los Tiguerones’, ambos le declararon la guerra a ‘Los Choneros’.
Sin embargo, José Adolfo Macías, alias ‘El Fito’, quien asumió el liderazgo de ‘Los Choneros’, logró convencer a ‘Los Tiguerones’ de reintegrarse a la agrupación.
José Adolfo Macías fue recapturado en junio de 2025 en un búnker en Manta. Posteriormente, fue extraditado a Estados Unidos en julio del mismo año, donde enfrenta cargos federales por narcotráfico, armas y conspiración.
¿Quiénes son ‘Los Lobos’ y cómo se vincularon con el CJNG?
Uno de los grupos criminales más poderosos que emergieron tras la muerte de Jorge Luis Zambrano fueron ‘Los Lobos’. Este grupo, que tomó fuerza en varias provincias de la sierra y la costa de Ecuador, estableció su propia lógica de poder, menos centralizada pero igual de violenta.
A diferencia de ‘Los Choneros’, Los Lobos establecieron vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación, lo que intensificó la disputa territorial entre ambas organizaciones criminales.
Los Lobos operan en al menos dieciséis provincias de Ecuador, con entre ocho mil y diez mil integrantes distribuidos en células autónomas que controlan territorios, extorsionan comercios y participan en la minería ilegal.
De acuerdo con un artículo del Wall Street Journal, el Cártel Jalisco Nueva Generación llegó a Ecuador después de que Colombia firmara la paz en 2016 con la guerrilla que controlaba los territorios cocaleros cercanos a la frontera ecuatoriana.
La alianza entre ‘Los Lobos’ y otros grupos criminales con el CJNG surgió poco después de la muerte de Jorge Luis Zambrano.
Las bandas más pequeñas buscaron vínculos con Jalisco, creyendo que una alianza con el rival de Sinaloa les permitiría enfrentarse a ‘Los Choneros’, comentó al medio estadounidense Miguel Pazmiño, exjefe de inteligencia del ejército de Ecuador.
El enfrentamiento entre estas dos agrupaciones criminales provocó un incremento considerable en los asesinatos en Ecuador, al punto que el actual mandatario ecuatoriano, Daniel Noboa, ya solicitó el apoyo de Estados Unidos para combatir y frenar el crimen organizado en su país.