Estados Unidos destinará a abogados militares a trabajar como jueces de inmigración temporalmente para agilizar los casi cuatro millones de casos pendientes en medio de la ofensiva del Donald Trump contra los inmigrantes, según confirmó el Pentágono a EFE este martes.
La solicitud fue hecha por el Departamento de Justicia y la defensa se encuentra “identificando jueces abogados y abogados civiles calificados para asignaciones temporales como Jueces de Inmigración”, dijo a EFE el portavoz principal del Pentágono, Sean Parnell.
El Pentágono detalló que “estos abogados del Departamento de Defensa reforzarán los recursos existentes para ayudar a combatir el atraso de casos, presidiendo audiencias de inmigración”. Antes de la confirmación, The New York Times ya había adelantado el plan cuando estaba en sus fases preliminares.
La decisión de reforzar este sistema judicial llega después de los despidos a jueces de esta área que, junto a los despidos voluntarios, podrían llegar a las 100 bajas.
Además, podría ser una manera de intentar contrarrestar a los tribunales que se están oponiendo a las iniciativas en materia migratoria que la administración de Trump está llevando a cabo.
El primer traslado constará de un grupo de 150 abogados a tribunales migratorios.
Pentágono podría duplicar el número de jueces de inmigración en EU
De completarse todos los traslados del Pentágono, el número de magistrados de inmigración en Estados Unidos se duplicará, ya que ahora hay unos 600 en activo.
La decisión responde a una orden ejecutiva del Departamento de Justicia que flexibilizó el proceso de nombramiento de jueces de inmigración temporales.
“Para ayudar a manejar la considerable carga de trabajo de los tribunales de inmigración, el Director de la Oficina Ejecutiva para Revisión de Inmigración, con la aprobación del Fiscal General, puede designar o seleccionar jueces de inmigración temporales, quienes tienen la autoridad de un juez de inmigración para resolver los casos asignados y administrar asuntos del tribunal de inmigración”, recoge esa orden.
Esto le otorga la posibilidad a las autoridades judiciales de elegir a magistrados de inmigración entre un grupo más amplio de candidatos calificados. Gracias a este cambio los abogados militares son elegibles.
Este es un nuevo movimiento de Trump por abrir las puertas de diferentes ámbitos de la administración al Ejército después de ordenar el despliegue de la Guardia Nacional en Los Ángeles, en junio, y en Washington, en agosto.