El entusiasmo se expandió entre los peruanos al ver que fue nombrado como nuevo líder del Vaticano el papa León XIV, un cardenal católico que guio la fe en el país sudamericano durante años y al que ven casi como un papa propio.
El papa León XIV tiene la doble nacionalidad estadounidense y peruana, lo que lo convierte en el primer papa de ambos países. En Perú, fue primero misionero y luego obispo.
En Lima, las campanas de la catedral capitalina repicaron tras el anuncio del cardinal Robert Prevost como sucesor del papa Francisco. Enseguida, la gente que estaba fuera de la iglesia empezó a hablar de la ilusión que le haría recibir la visita del nuevo pontífice al país.
“Para nosotros, los peruanos, es un orgullo que sea un papa que nos representa”, dijo Isabel Pánez, que estaba cerca de la catedral de Lima cuando llegaron las noticias sobre el nuevo pontífice. “Nos gustaría que nos visitara acá en Perú”.
En su primer pronunciamiento como papa desde el balcón de la Basílica de San Pedro, León XIV se dirigió en español a la gente de Chiclayo, una de las ciudades peruanas con más población, ubicada a 14 kilómetros de la costa peruana del Pacífico.
“Un saludo... a todos aquellos, en modo particular, a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe”, afirmó.
Thomas Nicolini, un peruano que estudia Económicas en Roma, acudió a la plaza de San Pedro en cuando se enteró que Prevost era el nuevo papa.
Diana Celis, que asistió a muchas misas oficiadas por Prevost en Chiclayo, contó a The Associated Press que él solía repetir una frase: “Yo vengo desde Chicago hasta Chiclayo, sólo se diferencia por algunas letras”.
Nacido en Chicago en 1955, Prevost obtuvo la nacionalidad peruana en 2015, confirmó el jueves el Registro Nacional de Identificación Ciudadana de Perú. En 2014, ejercía de administrador y después arzobispo de Chiclayo, un cargo que mantuvo hasta que Francisco lo convocó a Roma en 2023 para ocuparse del Dicasterio para los Obispos, el despacho que examina las candidaturas de obispos de todo el mundo, una de las funciones más importantes de la Iglesia católica.

“Él va a ser muy sensible a la doctrina social de la Iglesia y va a estar atento a los signos de los tiempos, sin duda”, afirmó a periodistas monseñor Edinson Farfán, obispo de Chiclayo.
Janinna Sesa, que conoció a Prevost cuando trabajaba para la organización caritativa internacional Caritas, indicó que es una de esas personas que “calza botas y camina por el barro” a la hora de ayudar a los más necesitados. Y recordó que así lo hizo en 2022, cuando lluvias torrenciales afectaron a Chiclayo y poblaciones vecinas.
También repartió comida y mantas a comunidades remotas andinas, a las que llegaba en su camioneta blanca sin importar que tuviera que dormir en un delgado colchón sobre el suelo. En esas zonas, contó Sesa, el nuevo papa comía lo que le ofrecían, incluida la típica dieta campesina de papa, queso y maíz dulce. Aunque, si había oportunidad, también le gustaba la carne asada, uno de sus platos favoritos, acompañada con un vaso de Coca-Cola.
“No se hace problemas en arreglar una camioneta malograda hasta hacerla andar”, también recordó, destacando el interés que tenía en lo automotriz.
Sesa añadió que Prevost fue una pieza clave para la compra de dos plantas de producción de oxígeno durante la pandemia de coronavirus, que mató a más de 217 mil personas en Perú.
“Se esforzó tanto en buscar ayuda que no sólo alcanzó para una planta sino para dos plantas de oxígeno”, recalcó la mujer.
Por su parte, la Red de Sobrevivientes de Abusos Sacerdotales (SNAP, por sus siglas en inglés) alegó preocupaciones por presuntas gestiones inadecuadas de Prevost respecto a tres denuncias de abuso realizadas por tres sacerdotes, una mientras era provincial de los Agustinos en Chicago a inicios de siglo y dos cuando fue obispo de Chiclayo en 2022.
La AP pidió comentarios a la Conferencia Episcopal Peruana, sin obtenerlas al momento.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, se pronunció el jueves sobre el nombramiento del nuevo papa y dijo que es un “momento histórico” para Perú y para Estados Unidos.
“Eligió ser uno de nosotros, vivir entre nosotros y llevar en su corazón la fe, la cultura y los sueños de esta nación”, dijo en un video en el que también recordó que Prevost decidió ser ciudadano peruano “como expresión de su profundo amor por el Perú”.

¿Cómo reaccionaron los estadounidenses por el nombramiento del papa León XIV?
Los estadounidenses en la Plaza de San Pedro estaban atónitos y jubilosos cuando se enteraron de que un cardenal estadounidense, Robert Provost, fue elegido papa el jueves y había tomado el nombre de León XIV.
“¿Quién habría pensado que en nuestra vida veríamos a un Santo Padre norteamericano?”, declaró el padre Thomas Montanaro, un sacerdote estadounidense de los Legionarios de Cristo.
Montanaro estaba entre las decenas de miles de personas que llenaron la plaza para el momento histórico.
Vítores de “viva il papa” y aplausos se extendieron por la multitud para celebrar al nuevo pontífice.
El padre Darius Lawrence, un sacerdote de California, comentó que el anuncio lo tomó completamente desprevenido.
“Como estadounidense, es una enorme sorpresa”, manifestó. “Nunca habría esperado que un estadounidense fuera nombrado papa. No estaba en ninguna de las listas que había visto, y había estado investigando un poco”.
Las banderas de muchas naciones ondeaban. Pero, significativamente, apenas había banderas estadounidenses. Un reportero de The Associated Press en la plaza vio sólo una, sostenida por un italiano.
Los estadounidenses no vinieron preparados.
Tampoco escucharon a León XIV hablarles en su lengua materna. Usó el italiano para saludar a las multitudes antes de pasar al español, un idioma que utilizó durante años de trabajo misionero en Perú, donde también se naturalizó.
Papas anteriores han influido en el mundo más allá de la Iglesia católica, y algunos no pasaron por alto que León XIV podría hacerlo también.
“Sólo espero que el nuevo papa pueda ayudarnos a dirigirnos en una buena dirección y, en términos de política, ya sabes, en estos momentos es muy complicado”, expresó Andrea Gallardo, una texana. “Sólo espero que pueda revitalizar una buena relación con nuestro presidente y todos los funcionarios del gobierno, de forma que podamos empezar a ir por un buen camino, diría yo”.
En Washington, el presidente Donald Trump dijo que era un honor que un estadounidense fuera elegido.

“¿Qué mayor honor puede haber?”, señaló el mandatario. “Estamos un poco sorprendidos y estamos felices.”
La elección de Provost como papa también resonó en Thomas NicolinChicli, de 22 años, un peruano de Lima que estudia economía en Roma.
“Estaba en casa, pero tan pronto como salió el humo, me vestí y vine al Vaticano... tan pronto como escuché su nombre, vine aquí”, comentó.
“Estoy realmente feliz por esto. Sé que es estadounidense, pero estuvo en Perú por mucho tiempo, 20 años. Trabajó en la región de Chiclayo. Esa es una área hermosa, pero una de las regiones que necesita mucha esperanza. Así que ahora espero que el nuevo papa ayude a tantas personas como sea posible, y trate de reanimar, digamos, la fe que los jóvenes han perdido”.