Unos meses antes, la red social de Donald Trump era utilizada para mensajes xenófobos del presidente de Estados Unidos, hoy Truth social se convirtió en un canal para compartir la campaña de México contra el uso del fentanilo.
Este domingo, el mandatario estadounidense se limitó únicamente a copiar y pegar el enlace de la campaña del gobierno de Claudia Sheinbaum que invita a los jóvenes a realizar deporte: ‘El ejercicio te hará fuerte, y te mantendrá lejos de las drogas’, dice el spot.
Sheinbaum da ‘guantazo’ al fentanilo con clases de box
Este domingo 6 de abril, la presidenta Claudia Sheinbauam presentó la Clase Nacional de Boxeo en el Zócalo de la Ciudad de México, donde 42 mil mexicanos realizaron actividad física.
“Las y los jóvenes mexicanos dicen: ‘No a la violencia, no a las adicciones’. El pueblo de México dice: ‘No al racismo, no al clasismo, no al machismo’. El pueblo de México dice: ‘Sí a la educación, sí al deporte, sí a la paz, sí al amor’”, señaló Sheinbaum.
Al igual que en la campaña gráfica, la presidenta expresó que el deporte nos hace más libres, más sanos y más felices.
A la clase estuvo invitado el campeón de boxeo, Óscar de la Hoya: “No a las adicciones; sí al boxeo”.
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, aseguró que con la Clase Nacional de Boxeo en todo el país se le da un ‘nocaut’ a la violencia.
“Todos nos unimos para decir: ‘Sí a la paz y no a la violencia’. La clase del boxeo y el deporte une a México”, comentó.
Cárteles frenan tráfico de fentanilo ante amenazas de Trump
“Es realmente sorprendente”, así describió Natalie Kitroeff, jefa de la oficina de la Ciudad de México de The New York Times, el desmantelamiento de narcolaboratorios clandestinos de fentanilo en Sinaloa tras la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos.
La reportera del NYT narró que regresó a Sinaloa para evaluar algún cambiado después de la toma de posesión de Trump. En su visita, confesó que contactó al cártel que le había filtrado información sobre las “cocinas” de fentanilo en el estado.
“Nos reunimos con los dos cocineros que nos habían invitado a sus laboratorios. Nos dijeron: ‘Cerramos todo. Hay una represión tan intensa por parte del Gobierno (mexicano) en este momento, y estamos bajo tanta vigilancia y presión, que no estamos cocinando nada”, explicó.
