Investigadores de Brasil están devastados por el reciente aumento de casos por COVID-19 y señalan que el hecho de que el Gobierno de Brasil no haya seguido las pautas basadas en la ciencia para responder a la pandemia ha empeorado la crisis.
“Ser científico en Brasil es muy triste y frustrante”, dijo Jesem Orellana, epidemiólogo del centro de la Fundación Oswaldo Cruz en Manaus, a la revista Nature. “La mitad de nuestras muertes se pudieron prevenir. Es un desastre total”.
Más de un año después de que Brasil detectara su primer caso de COVID-19, el país ahora se enfrenta a la fase más oscura de la pandemia, de acuerdo con el artículo.
El incremento en las infecciones por el nuevo coronavirus ha llevado a muchas de las unidades de cuidados intensivos de Brasil al borde del colapso.
Hasta el momento, en el país hay 14 millones 441 mil 563 casos confirmados, siendo el tercer país con más contagios, de acuerdo con datos de la Universidad Johns Hopkins. En tanto, a nivel mundial van 148 millones 963 mil 836 casos.
Y el número de muertos diarios y mensuales ha alcanzado niveles récord. Brasil acumula 395 mil 022 fallecimientos; mientras que a nivel global son ya 3 millones 140 mil 213, lo que representa el 13 por ciento de las muertes por COVID-19 en el mundo.
Según Nature, los investigadores brasileños estaban al tanto de la postura anticientífica de Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, que se dirigía a la pandemia. Después de asumir el cargo en 2019, recortó drásticamente los fondos para las universidades y para sus ministerios de ciencia y educación.
Mauricio Nogueira, virólogo de la escuela de medicina FAMERP em São José do Rio Preto, Brasil, dijo a la revista que las variantes del SARS-CoV-2 no pueden estudiarse adecuadamente tras el drástico recorte a los fondos para la ciencia que ordenó el mandatario.
Aunque los científicos reconocen que el aumento actual de COVID-19 en Brasil se debe en parte a la propagación de variantes del coronavirus, coinciden en que la inacción del Gobierno ha permitido que se produzca la propagación.
Científicos brasileños compartieron al medio científico dicen que la promoción de la desinformación por parte de la administración Bolsonaro ha empeorado las cosas.
“Todo lo que podemos hacer ahora es prepararnos para el impacto”, agregó Nogueira.