Como resultado de su amplia oferta de productos, así como su capacidad para ajustar precios de manera oportuna, Standard and Poor´s estima que Sigma registrará este año y el siguiente un sólido desempeño en sus resultados financieros.
“Proyectamos sólidos resultados operativos y financieros para Sigma Alimentos en 2025 y 2026, los cuales estarán respaldados por la amplia oferta de productos que ofrece la empresa, que abarca categorías de consumo básico y márgenes estables, así como por su capacidad para ajustar precios de manera oportuna y absorber una potencial volatilidad de los precios de las materias primas”, señaló la calificadora.
Agregó que al mismo tiempo la empresa mantiene una extensa cadena de suministro integrada y una red de distribución refrigerada que le otorga ventajas en términos de eficiencia logística, control de calidad y disponibilidad de producto.
“Proyectamos ingresos de Sigma por alrededor de 169 mil 422 millones de pesos (mdp) para 2025 y cerca de 177 mil 60 mdp para 2026, lo que representa un crecimiento de ingresos anualizado de 5.3 y 4.5 por ciento, respectivamente, explicados principalmente por ajustes de precios, al menos en el nivel de inflación en todas las regiones”, comentó.
Destacó que incorpora una proyección de un tipo de cambio de 19.35 pesos por dólar en 2025 y de 19.4 pesos por dólar en 2026, lo que debería impulsar los ingresos reportados en pesos y mitigar, en parte, el volumen consolidado estancado en 2025 debido a la débil confianza del consumidor.
“Esperamos un incremento de capex en 2025-2026; sin embargo, el apalancamiento de la empresa se mantendría bajo, creemos que el gasto de capital se mantenga elevado durante los próximos dos años, y se ubicará alrededor de 350 millones de dólares (mdd) por año, principalmente, para tomar oportunidades de crecimiento en México y Estados Unidos, al tiempo que mantiene inversiones en TI”, indicó.
Además, invertirá recursos para reconstruir la planta de Torrente en España, que fue afectada por inundaciones a finales de 2024. Consideramos que la compañía ha mantenido una disciplina financiera adecuada en la planeación y fondeo de estos proyectos, apoyándose principalmente en flujo operativo y coberturas de seguro en la planta de Torrente, lo que limita la presión sobre los indicadores crediticios.
“Anticipamos que, una vez que concluya este ciclo de inversiones hacia 2027, el capex se normalizará gradualmente a niveles más consistentes con su media histórica”, indicó.




