La tecnología va a toda velocidad; las empresas enfocadas en Inteligencia Artificial (IA) continuaron generando utilidades en el segundo trimestre del año. Algunos activos que lideran estos rendimientos son PLTR.O Palantir Technologies, alcanzando un rendimiento en lo que va del año del 104%, y HOOD.O Robinhood MR, del 168%.
El proveedor de Nvidia, NVDA.O, SK Hynix 00660.KS, registró ganancias trimestrales récord, impulsadas por la demanda de chips de inteligencia artificial, alcanzando rendimientos en lo que va del año del 48%. ORCL.K Oracle Corp, SPOT.K Spotify y NFLX.O Netflix superaron las previsiones del mercado, alcanzando rendimientos del 47%, 40% y 30% respectivamente.
Todas las acciones relacionadas con Inteligencia Artificial (IA) representan recomendaciones de inversión para un portafolio de inversión a mediano plazo. Bajo el esquema actual, el resto de las emisoras no califican como recomendación de inversión.
Para inversiones con horizontes de largo plazo se sigue recomendando incluir en el portafolio activos del grupo de empresas que están incluidas en los Magníficos Siete y que monitorizan las acciones tecnológicas de EE.UU. que dominan el mercado. Son los pesos pesados de Wall Street. Como grupo, Alphabet, Amazon, Apple, Meta, Microsoft, Nvidia y Tesla son las que han acumulado la mayor parte de las ganancias del mercado en los últimos años, alcanzando casi un tercio de la capitalización total del S&P 500.
En los primeros meses de 2025, el septeto ha decaído, quedando rezagado respecto a las cientos de otras acciones en el índice S&P 500.
Lo anterior se debe principalmente a las medidas arancelarias prevalecientes en la administración actual en los Estados Unidos. No obstante, acciones como Nvidia y Microsoft han tenido un rendimiento en lo que va del año del 30% y 24% respectivamente; el resto de las empresas han experimentado minusvalías.
Los valores de capitalización de mercado representados por los principales índices de Estados Unidos han sido impulsados por los Magníficos Siete, que se han beneficiado enormemente de los planes de gasto en inteligencia artificial por parte del gobierno y que actualmente representa más del 30% del valor del S&P.
Al extender el análisis más atrás, se puede ver que este grupo de activos ha subido significativamente más que el resto del mercado, alcanzando un crecimiento del 171% en los últimos cinco años; el resto de los activos representados en el índice S&P 500 han crecido en conjunto un 77% en el mismo periodo.
Es importante tomar en consideración que esta alta concentración de capital en un pequeño número de acciones ocasiona que, si estas se ven afectadas en sus valoraciones, estos cambios tienen el poder de mover el índice general, ya sea el S&P 500 o el Nasdaq Composite, ocasionando aumentos en la volatilidad y, si los gigantes fallan, ocasionan caídas repentinas y pronunciadas en estos índices, aunado a que pueden ocasionar minusvalías en las valoraciones de una cartera de inversión si las asignaciones en estos activos no son las adecuadas.
En el último año, algunos de los activos del grupo de los siete han tenido una mayor volatilidad que otros. El fabricante de chips Nvidia se disparó gracias a su lucrativa posición como el principal proveedor de chips para los innovadores en inteligencia artificial. Las acciones del fabricante de vehículos eléctricos Tesla fluctuaron mientras los inversores vacilaban en sus perspectivas de crecimiento, ya que el CEO Elon Musk juega un papel principal en la segunda administración de Trump.
El mercado de valores ha tomado lo positivo de la situación actual. La noticia de que EE.UU. había llegado a un acuerdo comercial con Japón y estaba cerca de cerrar un acuerdo con la Unión Europea antes de la fecha límite del 1 de agosto impulsó los mercados.
Hasta ahora, las empresas han reportado entre el 16 y el 22 de julio una pérdida combinada anual de hasta $7.8 mil millones de dólares, con los sectores automotriz, aeroespacial y farmacéutico siendo los más afectados por los aranceles, según Reuters.
Ante un mercado tan volátil, es importante mantenerse informado de los acontecimientos y tendencias que prevalecen e impactan en el crecimiento de las empresas. Esta constante actualización favorece los rendimientos de cualquier cartera de inversión.
La autora es Directora de Programa Licenciado en Finanzas Escuela de Negocios Tecnológico de Monterrey.