La inteligencia artificial (IA) está revolucionando el diagnóstico temprano del cáncer de mama en México, al detectar lesiones que podrían pasar desapercibidas incluso para radiólogos experimentados, afirmó la Dra. Lesvia Olivia Aguilar Cortázar, especialista en Radiología e Imagen por la UNAM, durante su participación en el evento The Best of Breast 2025, una iniciativa internacional impulsada por MSD realizada por primera vez en Monterrey.
“Lo que buscamos es dar diagnósticos de cáncer de mama más tempranos y oportunos, es decir, detectar lesiones incluso antes de que el médico o la paciente las identifiquen. Con la IA, ya se están detectando alteraciones que pueden ser imperceptibles incluso para los radiólogos”, explicó la doctora.
El software se instala en los equipos de mastografía digital y analiza las imágenes automáticamente al momento de ser interpretadas por el radiólogo.
A través de algoritmos entrenados con miles de estudios, el sistema identifica posibles anomalías y las resalta visualmente, algunas plataformas utilizan colores (verde, amarillo, rojo) para indicar el nivel de riesgo.
“Estos programas no van a sustituir al radiólogo, son programas donde van a ayudar para detectar alteraciones al radiólogo”, puntualizó.
Para mejorar los diagnósticos, la doctora recomendó la doble lectura de mastografías por dos radiólogos con distintos niveles de experiencia: “Como diríamos: cuatro ojos ven más que dos… entonces, esto va a permitir que se puedan identificar mayor número de lesiones y alteraciones”.
“Estos programas están diseñados principalmente para tamizaje, es decir, para analizar grandes volúmenes de mastografías. En algunos estudios se ha visto que el tiempo de lectura puede reducirse hasta en un 50 por ciento, lo que es clave cuando se revisan cientos de imágenes al día”, explicó la doctora.
La experta reveló que estudios muestran que, en radiólogos con menos de 5 años de experiencia, la IA mejora la detección de lesiones hasta en un 25 por ciento.
“Sin embargo, en los radiólogos de más años, de más expertise, de más de 10 años, prácticamente es la misma, no hay una variabilidad”.
Aunque ya existen en el mercado internacional varios programas avalados —por ejemplo, más de 20 validados por la FDA en Estados Unidos—, la doctora explicó que en México estos sistemas aún están en fase de prueba.
Además del avance tecnológico, la Dra. Aguilar subrayó que el manejo del cáncer de mama requiere un enfoque multidisciplinario: “No es el paciente de un solo médico, somo un grupo de médicos que estamos viendo desde el cirujano, oncólogos, oncólogos médicos, radiólogos especializados, patólogos, expertos en radioterapia y rehabilitación, es un equipo completo”.
También destacó el impacto emocional de un diagnóstico de cáncer y cómo cada paciente vive el proceso de forma distinta: “He conocido desde quienes se preguntan: ‘¿Por qué a mí?’ hasta quienes dicen que la enfermedad les ayudó a ser mejores personas. El cáncer afecta no solo a quien lo padece, sino a todo su núcleo familiar”.
La especialista enfatizó la importancia de mejorar la cobertura nacional en mastografía, ya que actualmente solo alcanza al 20 por ciento de la población en riesgo.
“Ahorita estamos en la etapa de ir conociendo estos sistemas, estos software, para ver cómo nos van a ayudar”, señaló.
Además, reconoció que Monterrey está a la par de otras grandes ciudades del país en cuanto a innovación médica, tecnología diagnóstica y formación de especialistas.