Fitch Ratings bajó las calificaciones nacionales de riesgo contraparte de largo y corto plazo y las mantuvo en observación negativa de Intercam Banco, de CIBanco a ‘CCC(mex) y de Vector Casa de Bolsa a ‘CCC(mex)’ desde ‘B(mex)’ y a ‘C(mex)’ desde ‘B(mex)’, respectivamente, para las tres instituciones y agregó dijo que retiró las calificaciones.
Las calificaciones nacionales de largo y corto plazo de todas las aliadas de los bancos: Intercam Casa de Bolsa, Intercam Grupo Financiero, CI Casa de Bolsa, y Finanmadrid México, Entidad Regulada (Finanmadrid), también bajaron, se mantuvieron en observación negativa y se retiraron.
Detalló que el retiro de las calificaciones obedece a razones comerciales. A partir de esta fecha, Fitch dejará de dar seguimiento a las calificaciones de Vector CB, CIBanco, Intercam Banco y las aliadas no bancarias de los dos últimos.
Explicó que la baja de las calificaciones refleja el debilitamiento significativo esperado por Fitch de los perfiles de negocio y financieros de las entidades financieras, vinculado al daño reputacional derivado del señalamiento por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos respecto a presuntas debilidades en materia de prevención de lavado de dinero, vinculadas al tráfico ilícito de opioides.
Desde el anuncio, Fitch ha percibido tendencias negativas sobre la capacidad de generación de ingresos de estas entidades, entre ellas la salida de clientes de algunas de sus principales líneas de negocio, aversión de diversos participantes del mercado para continuar operando con dichas entidades y una disminución significativa en los volúmenes de operatividad diaria y/o en los activos en administración o en custodia.
Además, en el caso de los bancos mencionados, Fitch ha percibido también un deterioro en la liquidez.
El nivel nuevo de calificación refleja el impacto negativo en la calidad crediticia de las entidades, la disrupción en sus modelos de negocio y los riesgos adicionales derivados de la incertidumbre significativa que estos eventos implican en términos de la flexibilidad financiera de estas entidades.
Fitch reconoce los esfuerzos realizados por las entidades afectadas, así como por las autoridades financieras nacionales tras decretarse la intervención gerencial temporal de las mismas, en aras de mantener operaciones en la medida de lo posible. Sin embargo, considera que la calidad crediticia de estas entidades podría seguirse debilitando conforme sus clientes actúen en relación con los señalamientos del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, aun a pesar de la reciente postergación de la fecha efectiva de tales órdenes al 4 de septiembre de 2025.
“Si bien las entidades siguen cumpliendo con sus obligaciones, las calificaciones al momento del retiro indican que, el nivel de riesgo de incumplimiento hacia adelante es muy alto en relación con otros emisores u obligaciones en el país”, añadió.
Las bajas de las calificaciones nacionales de largo y corto plazo de todas las aliadas de los bancos derivan de la capacidad de soporte menor de sus respectivos bancos aliados, luego de las bajas de calificación.