Mariscos Don Arturo abrirá su primera sucursal en Estados Unidos (EU), se trata de un nuevo formato el cual se llamará Camaleón by Mariscos Don Arturo, el cual abrirá en agosto de 2025 en McAllen, Texas.
“La verdad es que yo creo que es un brinco bastante importante, es un mercado con un potencial enorme; aquí estamos súper bien, pero vemos un área de oportunidad muy grande en Texas ahorita”, detalló Benjamín Salazar, CEO de Grupo Belova, matriz de Mariscos Don Arturo.
Agregó que, “los planes no son quedarnos solamente ahí en McAllen, tenemos como proyecto llegar a Austin, Houston, San Antonio y Dallas, todo el Sur, ese es el proyecto que traemos, pero primero tenemos que ir a salir al puro cienazo ahí en McAllen; la verdad me siento muy seguro de que sí podemos hacer ese paso y darlo bien puesto”.
Por su parte, Gallo Lizárraga, CFO de Grupo Belova, detalló que actualmente, Mariscos Don Arturo cuenta con cinco restaurantes, dos pescaderías y un Cedis, todas ellas en Nuevo León (NL).
“También traemos el proyecto de abrir una tienda nueva en Escobedo, que sería pescadería con algo de food court ahí para que puedan comer la gente que compre ahí mismo o para llevar”, anunció Lizárraga.
Salazar explicó que el nombre de su nuevo concepto, Camaleón, obedece a una transformación.
“Porque vamos a abrir con almuerzos mexicanos, o sea, comida de acá, de nosotros, del pueblo, de carretera, como para que nos conozcan, de asado, de cortadillo, de boda, como le dicen, de machacado, o sea, todo eso y luego vamos a cortar los almuerzos y empezamos con el mariscos, que es lo fuerte de nosotros, y luego estamos más o menos tanteándole que para las 7 y media estaremos haciendo un espacio, cerrar momentáneamente, o parar ahí para darle un giro y un poquito más de fiestita, de ambiente diferente, o sea, un ambiente 100 por ciento familiar”, expresó el CEO de Grupo Belova.
DE NL PARA EL MUNDO
Mariscos Don Arturo se fundó en 1980 en la Presa de la Boca por Arturo Salazar, padre del actual CEO de Grupo Belova.
“Mi papá tenía un taxi, su base estaba en lo que hoy es la Macroplaza, en ese entonces la iban a empezar a hacer (la Macroplaza) y se tuvo que mover y un tío mío que estaba aquí en Santiago, mi papá le compra el negocio, primero se llamaba Pescadería Don Arturo”, recordó Salazar.
Yo siendo un niño, mi papá era muy duro, me traía al puro cuento y ahí empezó la historia y ha sido como todo, cómo hemos pasado muchas cosas de situaciones de la pandemia, crisis, la inseguridad nos pegó una friega aquí a Santiago, a todos los restaurantes y a todo el sector porque por nosotros aquí en Santiago prácticamente el mayor ingreso que tenemos es el turismo, más que todo local”.