En lo sucesivo, Nuevo León (NL) tiene la oportunidad de liderar una transición energética inteligente que integre a los hidrocarburos como parte de una solución más amplia, sostenible y competitiva.
“Reconocer y fortalecer las dos cadenas de valor del sector energético –la de hidrocarburos y la de electricidad– no es una contradicción frente al futuro, sino una estrategia realista para alcanzarlo. En NL, donde la vocación industrial representa más del 25 por ciento del PIB estatal, esta transición debe ser gestionada con una visión técnica, responsable y escalonada”, dijo Eleazar Rivera Mata, Director del Clúster Energético de NL.
En entrevista con El Financiero agregó que, “por ello, es clave diversificar una matriz energética, sí, pero también garantizar la competitividad energética, la continuidad operativa y la disponibilidad de talento técnico e infraestructura.
“Las dos cadenas de valor energéticas de la entidad -hidrocarburos y electricidad- deben ser entendidas y desarrolladas como ejes estratégicos para la atracción de inversiones, la innovación tecnológica y la seguridad energética del Estado”.
Rivera Mata detalló que para impulsar las áreas prioritarias previas requeridas para el desarrollo regional se requiere de: gas natural como pilar de transición, ya que su disponibilidad es una ventaja competitiva para atraer industrias de alto consumo energético, como centros de datos, manufactura avanzada y química.
Señaló que también es necesario el desarrollo de infraestructura eléctrica flexible, puesto que las energías renovables intermitentes requieren sistemas eléctricos más resilientes, almacenamiento energético y redes inteligentes y una Industria petroquímica de alto valor agregado, ya que a partir de fracciones del petróleo, NL puede fortalecer su cadena química para producir plásticos técnicos, materiales avanzados y compuestos industriales.
Sobre la formación de capital humano técnico, dijo que las nuevas tecnologías de eficiencia energética, hidrógeno, captura de carbono y digitalización demandan talento especializado.
Rivera Mata señala en los mapas actuales ubican a la red estatal de líneas de transmisión eléctrica en 400 kilovoltios y ductos e infraestructura de hidrocarburos, lo que permite visualizar los principales corredores de energía del estado.
“Esta información es esencial para planear nuevas inversiones, fortalecer la resiliencia del sistema energético y ubicar zonas estratégicas para el desarrollo industrial”, señaló el especialista.
