Alpek anunció el cierre por tiempo indefinido de sus operaciones de resina de PET en su planta de Cooper River, ubicada en las inmediaciones de Charleston, Carolina del Sur.
La planta en cuestión se construyó a principios de los años setenta, cuenta con una capacidad instalada de 170 mil toneladas de resina de PET y representa aproximadamente el dos por ciento de los activos totales de Alpek.
La empresa explora constantemente formas de crear valor a través de optimización de su capacidad instalada y el fortalecimiento de su competitividad de costos.
En este sentido, la compañía ha ido creciendo mediante la utilización más eficiente de sus activos que la han mantenido como una de las líderes de la industria.
Detalló que transferirá la producción de resina de PET en la planta de Cooper River a sus otras instalaciones, lo que permitirá reducir los costos en aproximadamente 20 millones de dólares al año, así como mejorar la utilización de la capacidad.
Alpek se mantiene plenamente comprometida con su estrategia a largo plazo mediante la optimización de sus instalaciones, el crecimiento a través de diversos proyectos estratégicos y el fortalecimiento de su capacidad de reciclaje a lo largo de todo su portafolio de productos.