La Reserva Federal (Fed) dio ayer un respiro a los mercados financieros, luego de que el último trimestre del año se ha caracterizado por una fuerte volatilidad.
Una combinación de factores como la baja en el precio del petróleo, el bloqueo internacional sobre algunas economías y una serie de datos que anticipan un menor ritmo de crecimiento en los principales motores de la recuperación han presionado a las monedas de las naciones emergentes.
Aquí hacemos un recuento de cómo ha afectado este entorno a las economías que integran el grupo de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), además de México, y el efecto del mensaje de la Fed en sus divisas.
El rublo vivió ayer una recuperación de 12 por ciento frente a la moneda estadounidense, esto luego de que en los últimos días llegara a negociarse hasta en 80 rublos por dólar.
Sin embargo, en lo que va del año, la divisa muestra un ajuste cambiario de 82.9 por ciento, lo que la convierte en la más castigada entre las principales monedas emergentes.
Para este país hay una combinación de factores que han generado una "tormenta perfecta" y es que a la baja de los precios del petróleo se agregan el bloqueo comercial de los países occidentales, lo que a su vez ha deteriorado las expectativas de crecimiento económico y presionado la inflación.
Entre las medidas adoptadas esta una mayor intervención en el mercado de cambios y un ajuste más ortodoxo en su política monetaria que llevó a su tasa de referencia a niveles de 17.0 por ciento.
Las presiones para la principal economía de Latinoamérica han sido más internas que externas. Luego de atravesar por un periodo de volatilidad que generó la reelección de la Presidenta Rousseff y un pobre crecimiento económico al tercer trimestre del año –de sólo 0.01 por ciento— después de una recesión técnica, presionaron al real.
De hecho, en lo que va del año, esta moneda registra un deterioro acumulado en 2014 de 14.9 por ciento frente al dólar, reflejo del deterioro de las condiciones económicas internas, y es que aunque tuvo un ingreso extraordinario por haber realizado el Mundial de Futbol, esto fue insuficiente para reactivar el crecimiento.
La noticia de la Fed dio un respiro a la moneda brasileña, ya que fue traducida como que el tiempo de espera del banco central de Estados Unidos permitirá reactivar la demanda de activos con mayor riesgo, como los brasileños. Ayer, el real recuperó casi un 1 por ciento frente al dólar.
El yuan se mantiene como una de las monedas más estables entre los mercados emergentes, toda vez que la divisa del gigante asiático registra una reducción de sólo 2.36 por ciento frente al dólar en lo que va del año.
De hecho, el anunció de la Fed permitió que el Yuan registrara una baja de sólo 0.12 por ciento frente al dólar, en contracorriente a lo observado por la mayoría de las monedas emergentes.
El principal enemigo de China es su mercado interno y es que las últimas expectativas sobre el comportamiento de la economía para 2015 apuntan a un crecimiento de 7.1 por ciento, esto aún cuando se espera un crecimiento de 6.9 por ciento en sus exportaciones para el siguiente año.
Para el banco central chino, el principal problema va a ser su sector constructor. Con las restricciones decretadas por el gobierno para el financiamiento de nuevas construcciones, difícilmente se va a observar una dinámica superior al ocho por ciento en los siguientes trimestres.
De hecho, en un intento por apuntalar su economía, China utilizó más de 100 mil millones de dólares de sus reservas internacionales.
La elevada vulnerabilidad que muestra la economía de Sudáfrica es un factor en contra del rand su moneda. Muestra de ello es que luego del anuncio de la Fed, registró una recuperación frente al dólar de sólo 0.36 por ciento; sin embargo, en lo que va del año muestra un revaluación frente a la divisa estadounidense de 11.17 por ciento, siendo una de las más afectadas por el entorno externo.
Sudáfrica es considerada uno de los mercados emergentes más líquidos y de los más comercializados, pero es vulnerable a las crisis financieras mundiales, muestra de ello es que el actual entorno externo lejos de beneficiarlo, redujo las expectativas de crecimiento para este año a 1.7 por ciento, esto por la elevada dependencia de las exportaciones de materias primas.
Esta situación ya se tradujo en una reducción en las calificaciones soberanas por parte de Standard and Poor´s y de Moody´s, además de que el FMI alertó que esta economía tiene que arreglar varios problemas estructurales antes de reactivar el crecimiento.
Para India, el anuncio de la Fed es reflejo de que uno de los mayores compradores de mercancías de Estados Unidos muestra un crecimiento saludable y con capacidad de absorber el flujo de Asia, lo que permitió que la rupia registrará su segunda sesión de recuperación frente al dólar.
En dos días, la moneda ganó 0.31 por ciento frente al dólar. Pese al entorno internacional, la rupia es una de las divisas más estables, toda vez que muestra un aumento de solo 4.1 por ciento frente al dólar en lo que va del año.
Si bien es de las naciones que se beneficia de la dinámica económica de Estados Unidos y de la baja en los precios internacionales del petróleo, sus limitantes en el crecimiento son China y la aceleración de sus reformas estructurales.
La estrecha relación con China –es su segundo socio comercial- se ha traducido en una desaceleración en su ritmo de crecimiento, lo que ya influyó para que el PIB pasara de una dinámica de 9.0 por ciento anual en 2011 a poco menos de 6.0 por ciento al tercer trimestre de este año.
En tanto se anticipa que en 2015 el gobierno acelere el ritmo de las reformas estructurales para fortalecer su economía.
El estrecho vinculo comercial de México con Estado Unidos permitió que el peso registrara ayer su mayor recuperación frente al dólar al reportar una ganancia de 1.85 por ciento, una de las mayores de los mercados emergentes.
Sin embargo, el balance es negativo para la moneda nacional en 10.2 por ciento frente a la divisa estadounidense en lo que va del año.
Para México, el anuncio de la Fed se traduce en una mayor demanda de activos nominados en pesos, situación que ha sido una constante desde que la Reserva Federal adoptó su programa de recompra de valores por varios miles de millones de dólares.
Sin embargo, el peso no sólo ha estado presionado por la decisión de la Fed. La baja en los precios del petróleo se ha convertido en un factor de riesgo no sólo en materia comercial, sino también de finanzas públicas, lo que para varios analistas pude presionar más a la moneda mexicana en el mediano plazo.
De hecho, que el precio del petróleo se mantenga en niveles bajos puede ser un factor que desaliente las inversiones extranjeras, toda vez que las reformas energéticas dependen de una rentabilidad cercana a los 100 dólares por barril.