Rodrigo Medina, exgobernador de Nuevo León, fue retenido por las autoridades estadounidenses mientras intentaba salir de México junto con su familia.
Los hechos ocurrieron el sábado 26 de julio en el paso fronterizo de Los Indios, cercano a Matamoros, Tamaulipas, donde las autoridades estadounidenses no permitieron el paso en una primera instancia del exgobernador.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) fue la autoridad estadounidense responsable de la retención del exfuncionario, que de acuerdo con medios locales, viajaba con el objetivo de vacacionar.
Tras una revisión ‘extensa’, las autoridades finalmente permitieron la entrada a Estados Unidos a Rodrigo Medina, quien hace años estuvo preso en México.
¿Quién es Rodrigo Medina?
Nacido el 9 de septiembre de 1972, Rodrigo Medina fue gobernador de Nuevo León entre 2009 y 2015, con un pasado como diputado federal y como secretario de Gobierno regio.
Estudió Ciencias Jurídicas en la Universidad Regiomontana, y desde joven comenzó a trabajar en juzgados.
Tras años de labores como abogado y dentro de instituciones de Nuevo León, Medina entró como 2006 a la Cámara de Diputados representando al PRI; sin embargo, un año después fue llamado por la administración José Natividad González Parás para ser secretario de Gobierno en Nuevo León hasta 2009.
Logró colocarse como candidato del PRI para ser su sucesor y ganó las elecciones de 2009, por encima del panista Fernando Elizondo Barragán.
Rodrigo Medina fue el último gobernador priista en Nuevo León luego de un dominio del PRI de casi 100 años en la entidad, salvo el periodo 1997-2003 que ganó el PAN.
Medina tuvo entre sus polémicas el Casino Royale, donde en 2011 un comando armado realizó un ataque y mató 52 personas.
Su sucesor, Jaime Rodríguez Calderón ‘El Bronco’, dijo cuando entró al Gobierno que Medina había dejado miles de millones de pesos de endeudamiento, además de que comenzó una serie de investigaciones en su contra que lo llevaron a la cárcel en 2017.
La operación tornado investigó a Rodrigo Medina por irregularidades en su gestión, entre ellas las del Caso KIA, en el que se dieron facilidades fiscales a la armadora con tal de invertir en el estado.
Por dichas acusaciones fue detenido en enero de 2017, aunque solo estuvo unas horas en el penal de Topo Chico y posteriormente continuó su proceso en libertad hasta que fue exonerado en 2018.
