VERACRUZ.- Tras las redadas en Estados Unidos, nueve migrantes veracruzanos fueron detenidos y serán apoyados para pagos de fianzas, informó la gobernadora Rocío Nahle.
Detalló que los nueve son personas que tienen muchos años en Los Ángeles, por lo que sus familias se encuentran en aquel país y, por lo tanto, no se quieren someter a una repatriación voluntaria.
Aseguró que por ello y con la ayuda de un abogado que fue colocado por parte del Gobierno de México, solicitarán que se les brinde una fianza para que puedan quedarse con su familia.
Dicha fianza, dijo, será pagada por parte del Gobierno de Veracruz como parte de un plan de apoyo a las personas migrantes.
“Les informo: son nueve, nueve veracruzanos que fueron detenidos, sobre todo en una fábrica textil de ropa fina ubicada en el centro de la ciudad de Los Ángeles. Se trata de personas con muchos años de arraigo en Estados Unidos, que ya tienen hijos nacidos allá. Están detenidos en algún centro de detención en Los Ángeles.
Mexicanos detenidos en EU rechazan repatriación
El Gobierno de México, de inmediato, les asignó un abogado. Ninguno ha firmado la repatriación voluntaria, ya que se acogerán a una cita con un juez para solicitar una fianza y poder quedarse con su familia, que ya reside en ese país”, sentenció.
Además, sostuvo que en caso de que a pesar de la solicitud de la fianza, esta se les niega, el Gobierno de Veracruz será el encargado de ayudarles a regresar a la entidad desde el sitio donde sean dejados por parte del Gobierno de Estados Unidos.
“En caso de que los regresaran, si los colocan, ya sea en Tijuana o en Ciudad de México, donde los regresaran, el Gobierno de Veracruz se va a encargar de ayudarlos a regresar a su ciudad de origen, ya hay una coordinación con el Consulado de Los Ángeles”, indicó.
Dijo que en caso de que se sumen mayor cantidad de personas migrantes detenidas, se aplicarán las mismas medidas.
En México inquietan las deportaciones masivas de la administración Trump porque los mexicanos representan cerca de la mitad de los once millones de indocumentados en Estados Unidos.
