Trabajadores que fueron liquidados por Nissan Mexicana en su planta de Civac, el pasado 20 de enero, denunciaron que la empresa los ha obligado a firmar una carta renuncia, cuando es el patrón quien los está liquidando por el inminente cierre de la línea uno.
Hace unas semanas, El Financiero reveló que se dejaría de producir el modelo Versa en la planta en Jiutepec. Con ello iniciaría el despido de al menos 600 empleados, los de más reciente ingreso.
“Nos obligaron a firmar carta de renuncia porque si no entonces sería recisión de contrato, lo que nos hace quedar mal con la empresa y así le dio el visto bueno Conciliación y Arbitraje, pero ellos son los que nos están corriendo, nosotros no queremos renunciar”, expresó uno de los afectados, que solicitó el anonimato.
En el primer bloque se fueron 183 trabajadores; en el segundo 142. Ya van 350 que son liquidados, pero con esa carta renuncia. Si bien ellos señalaron en entrevista para El Financiero que les han dado su finiquito con base en lo que establece la ley, la empresa cayó en prácticas abusivas.

Trabajadores piden apoyo para su defensa
Aunado a ello, el Sindicato Independiente de Trabajadores de Nissan, a cargo de Leobardo Herrera Abarca, no ha intervenido por el gremio desde que se anunció el cierre de la línea uno. Por ello solicitaron el apoyo de autoridades estatales y abogados en la materia, para evitar supuestos abusos de la armadora.
Después de las denuncias de este día, la Procuraduría Estatal de la Defensa del Trabajo inició asesoría jurídica a los primeros empleados que empezaron a ser dados de baja pues este asunto corresponde atenderlo a la Secretaría del Trabajo Federal.
En un comunicado de la Secretaría de Desarrollo Económico y del Trabajo, informó que la planta es competencia federal, pero en caso de que surjan dudas o inquietudes, el procurador dará solución.
“Se han llevado a cabo una serie de estrategias para minimizar los estragos generados en aquellas personas que se vieron separadas de sus puestos de trabajo, manteniendo comunicación constante con los actores involucrados para salvaguardar sus derechos conforme a la ley”, aseguró la titular de la dependencia, Ana Cecilia Rodríguez González.
No obstante, la funcionaria estatal señaló que “gracias a las acciones emprendidas” en el tema, se logró que la armadora redujera el número de bajas, es decir, de 860 que se habían planteado quedó en 572 y, aseguró que se seguirán implementando protocolos para vincular en vacantes laborales a los trabajadores, en donde puedan ejecutar sus actividades.
La crisis en Nissan se ha derivado también a la raíz de la escasez de semiconductores en el mundo, como parte de los estragos de la pandemia por COVID-19, pero la empresa ha reiterado en diversos comunicados que reforzarán la línea dos y que buscarán generar el menor impacto negativo.