“Acabándose el narco, se acabarán los narcocorridos.” Así respondió Mario Quintero Lara, líder de los Tucanes de Tijuana, durante una entrevista en televisión diez años atrás. Hoy, la agrupación vuelve a estar en la mira, después de que se revivieran las sospechas de sus vínculos con el Cártel de los Arellano Félix.
Desde mediados de la década de los 90, la banda de género norteño conquistó al público mexicano con canciones como La Chona, El Tucanazo y El Centenario. Sus temas amenizaban las fiestas en todos los rincones del país y eran perfectas para el público más bailador. Sin embargo, gran parte de su éxito también se debe a sus famosos narcocorridos.
Los Tucanes que no son de Tijuana, sino de Sinaloa, dedicaron sus primeros temas a narcotraficantes de la época como Héctor ‘El Güero’ Palma y Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, entonces líderes del Cártel de Sinaloa.
“De la noche a la mañana, ‘El Chapo’ se hizo famoso, encabezaba una banda de gatilleros mafiosos, con un apoyo muy grande del ‘Güero’ Palma su socio”..., así le cantaba Mario Quintero a Guzmán Loera con la letra que compuso para el capo de la droga.
Las estrofas de Quintero también llegaron a contar la historia de los hermanos Arellano Félix, fundadores y líderes del Cártel de Tijuana, quienes presuntamente habrían “patrocinado” a los Tucanes durante aquellos años.
“Hombre de pocas palabras, orgullo de sus hermanos, cualquiera le tenía miedo, no le temblaba la mano, unos le decían Colores, otros Ramón Arellano“, comienza la canción de Los Tucanes.

¿Cuál era el vínculo entre los Tucanes de Tijuana y los Arellano Félix?
La periodista Mónica Garza reveló en un video de TikTok de su programa Historias Engarzadas. En la grabación, un músico le advirtió sobre el riesgo de hacer preguntas relacionadas con el ‘narco’.
“Al final de la grabación, este personaje cuando nos tomábamos la foto, me dijo en secreto: ‘Oiga, a ver si no me quitan a mi de cantar por sus preguntas, porque si a mí me quitan de cantar, a usted la van a quitar de estar preguntando”, contó.
Garza agregó que “esa fue una de las primeras amenazas” que recibió por hacer su trabajo. “Ahí la decisión que se debe de tomar es la de no autocensurarse, la de no tener miedo a preguntar”, sostuvo.
Aunque la comunicadora no reveló el nombre del músico, los usuarios de las redes inmediatamente evocaron la entrevista que hizo Mónica Garza a los integrantes de los Tucanes de Tijuana, Mario Quintero y Mario Moreno.
En un fragmento de aquella charla, se escucha que la periodista cuestiona a los músicos sobre los rumores que aseguraban que los Arellano Félix les habían financiado equipo, camiones y presentaciones privadas.
—Los señalan como empleados literalmente de los Arellano Félix, como protegidos de ellos... ¿Por qué los señalan tan directamente con ese cártel de la droga?— pregunta Mónica Garza.
A lo que Mario Quintero responde:
“La gente es muy creativa en ese sentido... yo creo que todas esas especulaciones, comentarios o rumores salieron a raíz de que nosotros tocábamos en todas las fiestas privadas de Tijuana... entonces no descartamos que alguna o dos o tres o la mayoría eran de ese tipo de gente."
El cantante admitió que ellos no sabían realmente a quién le tocaban y agregó que eso no debían saberlo si querían permanecer a salvo. “O sea, corríamos un riesgo si andábamos investigando”, apuntó Quintero.
Narcocorridos, entre la prohibición y la censura
La entrevista cobra relevancia en medio del debate sobre la prohibición de los narcocorridos en México y los esfuerzos de la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum para frenar la “glorificación” del ‘narco’ y la apología del delito.
Precisamente la frase “acabándose el narco se acabarán los narcocorridos”, dicha por Quintero, fue retomada por la banda Los Alegres del Barranco, luego de la polémica que surgió tras su show en Jalisco.
La banda interpretó la canción El del Palenque, inspirada en la figura de Nemesio Oseguera Cervantes ‘El Mecho’, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), lo que derivó en una investigación por apología del delito por parte de la Fiscalía del Estado.
A raíz de ello, el grupo musical está enfrascado en una batalla legal con los gobiernos de Michoacán y Jalisco, bajo el argumento de que la prohibición de interpretar narcocorridos afecta el derecho a la libertad de expresión.