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¿Cuáles son los síntomas del ‘mal de la montaña’ y cómo evitarlos?

¿Agarrarás ‘monte’ por primera vez? Antes de emprender un viaje con altitud considerable, debes contemplar algunos efectos secundarios que puede provocar como ‘el mal de la montaña’.

El mal de la montaña puede provocar dolores de cabeza. (Foto: Shutterstock)

¿Quieres lanzarte al Nevado de Toluca o a alguno de los montes cercanos a CDMX? Si eres de los que busca un ambiente fresco y rodeado de bosque para el fin de semana o vacaciones, considera algunos posibles efectos secundarios que pueden derivarse del conocido ‘mal de la montaña’.

Algunas zonas montañosas, aparte de ofrecer vistas espectaculares, también han sido sitios en los que ocurren accidentes. En México, los grupos de rescate y Protección Civil han atendido alrededor de 237 servicios este 2023 de personas que requieren de ayuda en lugares como el Nevado de Toluca.

Si estás considerando explorar alguna montaña o cerro, es importante que tomes en cuenta todas las dificultades y recomendaciones que llevan, como malestares físicos que pueden ser riesgosos.

¿Qué es el mal de la montaña?

De acuerdo con Medline Plus, un sitio especializado en temas de salud, el ‘mal de la montaña’ es una afectación que suele presentarse en personas que escalan cerros como alpinistas, excursionistas y hasta viajeros.


También es conocido como mal de altura y, según el portal especializado de Mayo Clinic, se trata de una serie de malestares que pueden ir desde síntomas leves hasta problemas de salud graves como edemas cerebrales y pulmonares.

En conversación con Mayo Clinic, el especialista Jan Stepanek asegura que esta afectación se le puede presentar a cualquiera que no se adapta al cambio de altura:

“Se trata de personas que tienen dificultades para continuar con un ritmo normal, como el resto de los viajeros, a gran altitud. Sea por disposición, problemas de salud preexistentes o la rápida naturaleza del ascenso, no logran adaptarse bien en un entorno de gran altitud”.

Medline Plus asegura que el mal de la montaña ocurre cuando alguien se expone a los 2 mil 400 metros de altura. Algunos ejemplos son viajes al Nevado de Toluca, Pico de Orizaba, Iztaccíhuatl, entre otros.


¿Cuáles son los síntomas del mal de la montaña?

Esta afectación le puede ocurrir a cualquier persona, depende de la capacidad de adaptación que tiene cada individuo. De acuerdo con Mayo Clinic, estos son los síntomas más comunes del mal de la montaña:

  • Falta de aire al respirar
  • Dolor de cabeza
  • Náuseas
  • Problemas gastrointestinales

El Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS por sus siglas en inglés), explica que estos síntomas se desarrollan entre las seis y 24 horas en las que un individuo se expone a ciertas altitudes. Asimismo, estos malestares pueden empeorar en la noche.

El NHS cuenta con algunos consejos para tratar el mal de montaña, estos son algunas de las maneras en las que se puede reducir la gravedad de los síntomas:

  • Detenerse y descansar
  • No subir al menos en 24 horas para que desaparezcan los síntomas
  • Asegurarse de tomar suficiente agua
  • Para el dolor de cabeza se puede tomar ibuprofeno o paracetamol
  • No tomar bebidas alcohólicas
  • No fumar
  • Evitar hacer ejercicio o esforzarse más durante el ascenso

Si los síntomas continúan, el NHS recomienda descender para evitar que el ‘mal de montaña’ puedan convertirse en algo peligroso.

¿Cómo evitar el mal de montaña?

Para poder explorar y evitar el mal de montaña durante las escaladas, Medline Plus recomienda ascender de manera gradual. Hay excursiones que pueden llevar días, es por ello que es recomendable subir paulatinamente.

El NHS asegura que, usualmente, toma un par de días para que el cuerpo se acostumbre a los cambios bruscos en la altitud. Algunas recomendaciones para evitar el mal de montaña son las siguientes:

  • Tomarse de 2 a 3 días para acostumbrarse a las altitudes elevadas antes de superar los 2 mil 500 metros.
  • Evitar subir más de 300 a 500 metros al día.
  • Descansar cada 600 a 900 metros que se suba o descansar de 3 a 4 días.
  • Tomar suficiente agua.
  • Evitar fumar y tomar bebidas alcohólicas.
  • Evitar el ejercicio intenso durante las primeras 24 horas.
  • Contar con una dieta ligera pero alta en calorías.

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