Tras su reciente integración a la cámara de la cerveza, los microcerveceros del país ya pusieron sobre la mesa sus asuntos de interés, como buscar apoyo de las dos grandes cerveceras del país para impulsar la homologación del IEPS entre la cerveza artesanal e industrial.
"Las dos grandes cerveceras (Grupo Modelo y Cuauhtémoc Moctezuma) están evaluando la conveniencia de impulsar una cuota fija. Es un tema que se empujará desde cámara con las autoridades, si no será algo que trabajaremos por nuestro lado", dijo Jaime Andreu, director comercial de la cervecería Primus.
En México el esquema de aplicación del IEPS es ad valorem, lo que significa que pagan un impuesto más alto en la cerveza artesanal que la industrial porque su precio es mayor.
"El IEPS a la cerveza artesanal es de mil pesos por hectolitro, mientras que las industriales sólo pagan 300 pesos. Sin embargo, se debe tomar en cuenta que la cerveza artesanal es más cara porque cuesta más producirla: la malta se tiene que importar porque que no hay malteras en México que cumplan con las características de una cerveza artesanal", expuso.
Otro de los temas que buscarán impulsar es la de lograr una verdadera apertura de mercado. El año pasado la extinta Comisión Federal de Competencia (CFC) facilitó la venta de cervezas artesanales en restaurantes y bares, un privilegio que sólo tenían las grandes cerveceras; Grupo Modelo y Cuauhtémoc Moctezuma (CM) y se reflejaba en contratos de exclusividad con los establecimientos.
Actualmente, pese a que ya no existen las cláusulas de exclusividad, estas dos empresas ofrecen apoyos económicos a los negocios que cumplan con ciertos volúmenes de venta, por lo que "en ocasiones los establecimientos comerciales se niegan a vender cervezas artesanales por temor a no cumplir con las cuotas de venta de cerveza industrial", indicó Jesús Briseño, director general de cervecería Minerva y presidente de la Asociación de Cerveceros de la República Mexicana (Acermex).
APERTURA INCOMPLETA
A decir de Briseño, la medida para eliminar las cláusulas de exclusividad ha tenido efectos positivos, pero la apertura todavía es incompleta.
La firma a su cargo ha obtenido alrededor de 38 cuentas nuevas de bares y restaurantes a las que antes no podían llegar debido a que estos establecimientos tenían contratos de exclusividad con las cerveceras dominantes en México.
"Los microcerveceros sólo hemos podido acceder a menos de 10 por ciento del universo potencial de establecimientos que fueron liberados de esta cláusula de exclusividad", dijo. Este mercado es de alrededor de 4 mil 400 puntos de venta ubicados en México, Guadalajara y Monterrey.