Veracruz, Veracruz. - El estado mexicano ya controla el 61 por ciento de la capacidad de generación de energía eléctrica del país gracias a la compra de 13 plantas de la empresa de origen español, Iberdrola, señaló Ricardo Octavio Mota Palomino, director general del Centro Nacional de Control de Energía (CENACE).
De esta manera, el Gobierno de México, a través de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) supera el mínimo de 54 por ciento establecido en la Ley del Sector Eléctrico.
“Con la compra de centrales generadoras a Iberdrola, el Ejecutivo Federal avanzó en su objetivo de aproximar las proporciones de generación a la meta de 54 por ciento bajo control del Estado mexicano y 46 por ciento en manos de permisionarios privados”, detalló el directivo durante su participación en el 6to Congreso Internacional de Energía.
¿Cómo ayudó la compra de las plantas de Iberdrola al Estado mexicano?
Esta mayoría no se habría alcanzado sin las plantas de Iberdrola, ya que actualmente, la CFE cuenta con una capacidad de 48 mil 873 MW, lo que representa el 51.5 por ciento de la capacidad total del país (94 mil 974 MW).
En tanto, las 13 plantas compradas a Iberdrola a través del FONADIN equivalen a 9 mil 050 MW, es decir, el 9.5 por ciento de la capacidad de generación de México.
“Hace tres años, se llegó a tener el 35 por ciento únicamente de la capacidad instalada bajo el control del Gobierno Federal, de no haberse revertido esta situación, la participación privada tendría el 84 por ciento de la generación eléctrica para 2029”, indicó el director del CENACE.
Agregó que, aunque aparentemente existe una capacidad de generación suficiente, es imperativo fortalecer la planificación de ampliaciones al Sistema Eléctrico Nacional, con el fin de restaurar el equilibrio adecuado entre generación y demanda, un equilibrio que se ha visto afectado por la Reforma Energética de 2013.
¿Cuáles son los retos del sistema eléctrico de México?
Detalló que, actualmente, el Sistema Eléctrico Nacional enfrenta una etapa clave, ya que, por un lado, debe garantizar la confiabilidad y seguridad operativa con una red eléctrica en crecimiento y una demanda constante creciente.
“Y, por otro lado, tiene que adaptarse a los nuevos modelos energéticos, impulsar la transición energética y facilitar la incorporación de tecnologías emergentes. El papel del CENACE seguirá siendo crucial como garante técnico y neutral del sector eléctrico mexicano”, subrayó.
Por lo tanto, el especialista consideró que es necesario desarrollar las capacidades técnicas y operativas que permitan gestionar un Sistema Eléctrico Nacional y un mercado de energía eléctrica que equilibre los intereses públicos y privados, tal como lo plantea la nueva administración federal.
“Además, el crecimiento reciente del sector privado ha añadido presión para encontrar y conservar talento especializado desde el sector público. En el ámbito público, la atracción y conservación de talento calificado se ha convertido en un desafío considerable para el sector eléctrico mexicano”, advirtió.