El Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) estima que México podría registrar hasta mil patentes relacionadas con la industria de los semiconductores al cierre de este año, lo que implicaría una cifra récord y un avance en comparación con los 700 registros que se presentaron el año pasado.
“En 2024 fueron aprobadas 16 mil patentes relacionadas con semiconductores, de las cuales aproximadamente 700 fueron mexicanas (…) En lo que va de este año llevamos 493 solicitudes de patentes, pero 150 ya fueron aprobadas (...). Esto significa que este año tenemos previsto alcanzar un récord histórico con unas mil solicitudes de patentes de semiconductores mexicanas”, afirmó Santiago Nieto, director general del IMPI.
En medio del endurecimiento de la rivalidad tecnológica entre EU y China, México alcanzó su máximo histórico en registros de patentes relacionadas con semiconductores.
El impulso se alimenta del Plan Maestro de Semiconductores 2024‑2030, iniciativa en la que México ha avanzado en 16 de sus 30 metas, y busca integrar un capítulo específico en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T‑MEC) para generar condiciones de inversión para el sector, lo que hasta ahora ha permitido que en el país operen casi 500 empresas de semiconductores como Intel, Skyworks, Qualcomm y Samsung.
En México ya se fabrican semiconductores destinados a sectores como electrodomésticos, dispositivos médicos y autos, especialmente en procesos de ensamblaje y prueba, pero aún no se producen microchips avanzados para celulares, centros de datos o aplicaciones de Inteligencia Artificial.
“Por ahora las empresas de semiconductores mexicanas únicamente nos estamos centrando en producir microchips para sectores clave que tienen una alta demanda como el de dispositivos médicos o el automotriz, pero no estamos trabajando en semiconductores avanzados porque estas tecnologías requieren inversiones millonarias”, explicó Alejandro Franco Rodríguez, CEO de QSM Semiconductores.
Empresas extranjeras sin certidumbre
A pesar de que el gobierno ha generado las condiciones adecuadas para atraer este tipo de capitales de grandes firmas, el futuro del sector no esta garantizado.
Foxconn, por ejemplo, asegura que seguirá invirtiendo en Jalisco para ensamblaje de superchips de Nvidia, pero reconoce que el impacto de los aranceles del gobierno estadounidense será un factor clave en su planificación futura.
Samsung ha considerado a México para expandir sus capacidades de ensamblaje y prueba de chips, pero fuentes del sector aseguran que su plan se encuentra en evaluación debido al riesgo de nuevas barreras comerciales desde EU.
“El país ha dado pasos firmes para posicionarse en la cadena global de valor de semiconductores, pero aún enfrenta retos críticos para detonar inversión extranjera directa sostenida. El escenario internacional, particularmente la política comercial de Estados Unidos, será un factor determinante para que los grandes capitales apuesten por México”, explicó el CEO de QSM Semiconductores.
Es necesario reducir los insumos de Asia
Reducir la dependencia de insumos asiáticos para la fabricación de semiconductores se ha convertido en una prioridad estratégica para América del Norte, toda vez que más del 73 por ciento de los materiales críticos utilizados en la producción de chips (silicio, gallio, germanio, químicos especializados y equipos de fotolitografía) provienen de países como China, Taiwán y Corea del Sur, lo que expone a la región a disrupciones logísticas y tensiones geopolíticas.
Para México, sustituir esas importaciones por materia prima de origen estadounidense no solo reforzaría la resiliencia de su cadena productiva, sino que también facilitaría el cumplimiento de reglas de origen dentro del T-MEC, atrayendo más inversión y reduciendo riesgos arancelarios.
“Nosotros ya estamos trayendo nuestra materia prima desde EU y esto nos ha permitido estabilizar costos, reducir tiempos de entrega y mejorar la competitividad del sector. Sustituir esas importaciones asiáticas es posible porque en Estados Unidos también tenemos toda esa materia prima”, dijo Alejandro Franco.
Afirmó que avanzar hacia una cadena de suministro regional fortalecería los esfuerzos por posicionar a América del Norte como un bloque tecnológico frente a Asia.
“México podría florecer como polo de chips en América Latina, pero sin la certeza de alianzas comerciales confiables y sin mitigar el riesgo arancelario impuesto por Trump, las intenciones de inversión de grandes actores seguirán postergadas”, concluyó el CEO de QSM Semiconductores.