Imponer aranceles al sector farmacéutico sería contraproducente para Estados Unidos, afirmó Rodrigo Herrera Aspra, presidente de Genomma Lab. En lugar de medidas restrictivas, Herrera sugiere consolidar un bloque regional con México para fortalecer la capacidad productiva frente a Asia.
“Lo que requiere Estados Unidos es hacer todo un bloque completo y poner aranceles es justo lo opuesto”, afirmó en entrevista Rodrigo Herrera Aspra, presidente del Consejo de Administración de Genomma Lab.
La industria mexicana tiene el potencial de convertirse en un socio clave para el suministro de medicamentos y dispositivos médicos, especialmente en un contexto donde el 92 por ciento de estos productos se exportan a EU.
Sin embargo, las políticas arancelarias podrían frenar el desarrollo de una industria que tiene todo para fortalecerse a través de la cooperación regional.
El empresario destacó que actualmente la mayor importación de productos farmacéuticos en EU proviene precisamente de Asia, por lo que construir una alianza sólida con sus socios más cercanos, particularmente México, tendría mayor sentido estratégico.
De acuerdo con Herrera Aspra, la industria mexicana tiene el potencial para convertirse en un socio clave en el suministro de medicamentos y productos de salud al mercado estadounidense.
“Estoy muy optimista para el futuro de la industria farmacéutica en México, que sin duda va a colaborar para Estados Unidos”, sostuvo Rodrigo Herrera, el también integrante del programa para emprendedores Shark Tank México.
En este contexto, adelantó que las empresas del sector ya están tomando medidas concretas para anticiparse a un entorno más complejo que terminaría por afectar no sólo a México, sino también a Estados Unidos.
“En el caso de nosotros ya tenemos estrategias y dentro de la industria farmacéutica ya estamos colaborando con otros actores para integrar algunos equipos de trabajo”, agregó el directivo.
Las declaraciones surgen en medio de una discusión creciente sobre nuevas políticas comerciales en la Unión Americana, incluidas posibles tarifas para productos farmacéuticos importados y dispositivos médicos, lo que representa un riesgo para México dado que 92 por ciento de la producción de dispositivos médicos fabricados en el país son exportados hacia Estados Unidos.
Herrera refirió que estas decisiones frenarían el impulso de una industria que tiene todo para fortalecerse a través de la cooperación regional, no de la fragmentación.