El reciente robo a Grupo Minero Bacis, ocurrido en la carretera Durango– Puerto de Manzanillo, podría representar una pérdida de hasta 300 mil dólares, aproximadamente 6 millones de pesos mexicanos, debido al alto valor del cargamento sustraído, que incluía 33 toneladas de concentrado de oro y plata.
“El cargamento, por ser de oro y plata, debe ser un concentrado con una alta ley (alta proporción o cantidad del metal deseado presente en un mineral o roca). No estamos hablando de un concentrado de plomo o zinc, estamos hablando de oro y plata, que tiene valores muy valiosos en el mercado. El cargamento que se robó este comando sí es bastante valioso”, explicó a El Financiero una fuente con conocimiento del tema que pidió mantener el anonimato.
De acuerdo con los primeros reportes, un grupo armado interceptó el convoy que transportaba el cargamento en una zona despoblada del municipio de Santiago Papasquiaro. Tras someter a los custodios, los responsables huyeron con la carga, sin que hasta el momento se tenga conocimiento del paradero del material ni de los responsables.
Con lo anterior, la fuente consultada subrayó que el valor del cargamento no solo radica en el volumen robado, sino en la alta ley de concentración de metales, por lo que las pérdidas para la minera dirigida por José Jaime Gutiérrez Núñez podrían llegar a los 300 mil dólares.
“El valor de este cargamento, por la alta ley de concentración que tiene, podría tener un valor cercano a los 300 mil dólares, porque es un concentrado de oro y plata que es muy valioso. Si bien las pérdidas no son de millones de dólares, sí es una buena cantidad de dinero lo que representa en pérdidas para la mina”, explicó.
Necesario reforzar la seguridad en carreteras, advierten
El caso de Grupo Minero Bacis no es el primero que ocurre en el último año, por lo que la fuente consultada advirtió que, si las autoridades no refuerzan las medidas de seguridad en las carretas del país, este tipo de delitos podrían ir en aumento dado que los cargamentos son muy valiosos y fáciles de mover en el mercado negro.
“Este robo es muy grave, claro que lo es, y las autoridades deben tomar cartas en el asunto para que una situación como esta no se vuelva a repetir, porque el año pasado vimos un caso similar con la empresa Peñasquito, que le robaron seis góndolas cargadas de concentrados de oro, plata, zinc y plomo”, sostuvo.
Además, detalló que, por la naturaleza del cargamento, es probable que los responsables busquen colocar el material robado en el mercado negro, donde existen fundidoras clandestinas capaces de procesarlo para extraer los metales preciosos.
“Con este cargamento, los responsables del robo pueden hacer muchas cosas: lo primero es venderlo en el mercado negro para fundirlo en fundidoras clandestinas y obtener un metal que después se puede refinar para joyería o simplemente para obtener el oro y usarlo como moneda de cambio”, explicó.
Además del mercado ilícito nacional, existe la posibilidad de que el concentrado sea exportado por contrabando, alertó.
“Otra cosa que pueden hacer es exportarlo en contrabando, esa puede ser otra forma de mover este cargamento robado. Incluso pueden venderlo en el mercado negro para enriquecer otros minerales de oro y plata que salgan de otras minas para incrementar su valor”, agregó.
Vale la pena recordar que, hasta el momento, ni Grupo Minero Bacis ni las autoridades, han emitido detalles adicionales sobre el avance de la investigación, por lo que no se sabe si ya tienen identificados a los responsables o si ya se tiene registro sobre el posible paradero del cargamento.