Los sobrecargos de Aeroméxico aceptaron un incremento salarial diferenciado que beneficia a los empleados del contrato B con un aumento del 5.35 por ciento y a los de contrato A con un aumento del 3.93 por ciento.
La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) indicó que el acuerdo fue aprobado por 120 votos a favor, 36 en contra y 3 abstenciones.
De esta manera, los sobrecargos tendrán esos aumentos salariales de acuerdo con su contrato a partir del 1 de junio y hasta el 31 de mayo del año siguiente, cuando se negocie un nuevo aumento salarial con la empresa.
De esta manera, la aerolínea y los empleados dejan atrás la posibilidad de una huelga en Aeroméxico después de una prórroga de 10 días a las negociaciones.
La última propuesta de aumento rechazada por los sobrecargos había sido de 4.5 por ciento.
Más temprano, la ASSA difundió un documento judicial en el que la autoridad laboral detalló las condiciones financieras de la línea aérea.
Los documentos judiciales, revisados por El Financiero, indican que Aeroméxico está negociando con los trabajadores en una situación complicada para sus finanzas: sus ganancias netas se derrumbaron 79 por ciento en el primer trimestre de este año, ello en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Asimismo, la empresa tuvo que aumentar su deuda para incrementar su flota, por lo que sus pasivos ascendieron a 3 mil 949 millones de dólares, de acuerdo a lo comunicado por la jueza a la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA).
“Ante la situación real de la empresa, que se advirtió de elementos objetivos y la pretensión del sindicato de obtener mejoras a lo propuesto, la autoridad propuso como solución que se incrementara a 4.5 por ciento, una vez analizado, la empresa lo autorizó. Esta es la última propuesta formal realizada y que, bajo el principio de buena fe en la negociación, se solicitó a la empresa no sea disminuida, aun con las pérdidas generadas en ventas por la especulación de una suspensión de labores”, advirtió la jueza Montero Álvarez.
El documento judicial también explica que los ingresos en el primer trimestre de Aeroméxico tuvieron una caída del 8.1 por ciento con respecto al mismo lapso del año pasado, además de que si bien se ha generado un aumento en la oferta de asientos, los pasajeros movilizados por la línea aérea en el mismo periodo han disminuido cerca de 2 por ciento.
Cabe recordar que la plantilla laboral de Aeroméxico está contratada con dos esquemas, por lo que el B, de acuerdo con lo indicado por la jueza, podría tener un incremento mayor al del A para así generar equidad en la revisión salarial en ciernes.
