La presencia de autos usados importados en el país, así como el consumo de combustibles de baja calidad del llamado huachicol, afecta las ventas de la industria automotriz, la salud de los propietarios y el medio ambiente, alertó la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores (AMDA).
Guillermo Rosales, presidente de la AMDA, informó que mientras el mundo transita hacia el acceso a tecnologías y combustibles más limpios, México aún enfrenta importantes retos que han ralentizado el avance de la industria formal de automóviles.
“Una de las problemáticas más importantes que enfrentamos es que no hay una renovación vehicular, no hay una transición en la que los vehículos más antiguos vayan saliendo de circulación, dando paso a una reposición que incorpore vehículos con menores impactos debido a la disposición de mejor tecnología”, dijo.
Destacó que desde enero de 2022 a septiembre del año pasado, se regularizaron alrededor de 2.5 millones de autos chocolate importados que entran por la frontera sin catalizador o que son obsoletos; sin embargo, la AMDA estima que esta cifra pueda ya superar los 3 millones de vehículos, ya que el gobierno dejó de informar del programa.
Adicionalmente, destacó que el consumo de combustible de mejor calidad ha bajado en este mismo periodo, lo que indica que muchas de las unidades que circulan en el país consumen del llamado huachicol o combustible robado y no refinado.
“El consumo de combustible en este periodo se encuentra por debajo de lo ocurrido antes de la regularización (sin considerar pandemia), tenemos la introducción de combustibles que no están dentro del sistema formal de comercialización. Estos combustibles no tienen ninguna aplicación, certificación de calidad y generan una mayor contribución al impacto medio ambiental”, dijo.
Consideró que esto agrava el daño fiscal y el fortalecimiento de los grupos criminales, pero sobre todo “mancha la reputación” de la industria automotriz, por lo que urgió tomar medidas.
