El sector privado llamó a preservar el libre comercio a través del diálogo trilateral y la continuidad de los principios del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá ( T-MEC), a no escalar las acciones y buscar el entendimiento para solucionar los problemas detrás de la controversia entre el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y la presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
México sería el más afectado en una guerra arancelaria con su vecino del norte, aunque Estados Unidos no saldría ileso, señaló Larry Rubin, presidente de la American Society México, al considerar que lo ideal es no escalar estas acciones y mejor colaborar para encontrar un entendimiento.
“A los empresarios tanto mexicanos como estadounidenses, no les conviene ningún tipo de acción ni del gobierno mexicano, ni del gobierno estadounidense, pero creo que es muy importante que en vez de escalar la situación, se busque un común entendimiento, ya que a México no le conviene ningún tipo de arancel”, dijo a El Financiero.
Advierten sobre consecuencias de una guerra de aranceles
Lo ideal es encontrar la colaboración para no hacer más grandes las reacciones a las amenazas del próximo presidente de Estados Unidos sobre imponer aranceles a tasas del 25 por ciento a las importaciones procedentes de sus vecinos del norte y sur.
“Siempre creemos en American Society que sería lo ideal no escalar este tipo de acciones que se puedan tomar desde un futuro gobierno estadounidense. Al final de cuentas, a quien le afectará más sin duda es a México, pero también tiene una afectación en Estados Unidos, el escalamiento de aranceles”, reconoció.
Esta controversia no abona al ambiente de incertidumbre que ya premia en el país y aunque se descarta una guerra comercial, el sector empresarial mexicano se debe mantener firme, conscientes de que, al ser el principal socio comercial de Estados Unidos, su economía requiere de la relación comercial con México; sobre todo ante el conflicto que tienen con China, señaló José de Jesús Rodríguez, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco) de la Ciudad de México.
“Sin duda alguna no abonan en nada declaraciones como esas, pero nosotros tenemos que mantenernos firmes en el sentido de decir: somos el principal socio comercial de los Estados Unidos y ellos no se pueden ahorcar a sí mismos, ya el problema entre China y Estados Unidos, que es geopolítico, muy complicado, la única alternativa que tienen ellos es México, somos su principal proveedor, entonces no perdamos de vista eso”, dijo entrevistado en el Primer Foro Centro de Mediación y Arbitraje Canaco CDMX.
Impacto en EU en caso de imponer aranceles a México
Si alguna medida arancelaria se toma, podría generar desabasto hacia Estados Unidos e inflación para sus consumidores, por lo que descartó una guerra arancelaria y confió en que estas acciones sean atemperadas con una “correcta negociación” entre los dos gobiernos.
Gerardo Tajonar Castro, presidente de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), subrayó que esta medida generaría una afectación mutua en la región.
“Gran parte de los insumos que requerimos, por ejemplo, para la industria automotriz, son de empresas norteamericanas. Un tractocamión requiere el 70 por ciento de insumos de EU; el 20 por ciento de México, y un 10 por ciento de países como Corea o Japón. Una guerra comercial nos afectaría a todos,” explicó.
Emfatizó que la interdependencia económica entre los tres países del T-MEC hace inviable un aumento arancelario de esta magnitud.
“Tenemos que aprender a negociar y platicar con nuestros proveedores norteamericanos. No nos conviene este tipo de guerra comercial que pudiera suscitarse, porque habría represalias de México hacia algunas fracciones arancelarias norteamericanas, y eso no nos conviene a nadie,” dijo Tajonar.
Kenneth Smith Ramos, socio de la firma Agon y exnegociador del T-MEC, coincidió en que estas políticas serían contraproducentes para la economía estadounidense, pues indicó que imponer los aranceles que amenaza Trump significa castigar al consumidor estadounidense, reducir la competitividad de EU y eleva la inflación.
“La apuesta de Trump es riesgosa, ya que la economía estadounidense depende enormemente de los mercados mexicano y canadiense para sus exportaciones, así como de los insumos provenientes de estos países para su producción industrial. Es un balazo en el pie”, apuntó.
Temen inestabilidad
Octavio de la Torre, presidente de la Concanaco Servytur, dijo que de llevarse a cabo la amenaza de Trump, podría derivar en disputas comerciales que afectarían la competitividad global de la región, generarían crisis económicas e inestabilidad en los mercados comerciales de otras regiones.
“Este tipo de acciones, derivadas de decisiones radicales unilaterales, subrayan la necesidad de evitar un círculo vicioso de represalias que impacten negativamente en las economías y poblaciones de las tres naciones”, advirtió en un posicionamiento en el que adelantó que la confederación se reunirá con autoridades gubernamentales como la Secretaría de Economía y de Relaciones Exteriores, “para plantear estrategias, objetivos y líneas de acción y conformar un frente sólido y unido como país”.
Entrevistado en ese foro, el senador Alejandro Murat, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, confió en el diálogo como el instrumento para encontrar los mecanismos de solución a los retos conjuntos de migración, fentanilo y tráfico de armas de México y Estados Unidos.
“Respaldamos la carta que hoy la presidenta Claudia Sheinbaum le manda al presidente electo Donald Trump; hay que destacar este fabuloso instrumento que es el diálogo y ella así lo recalca y es lo que ha permitido que la relación entre México y Estados Unidos haya dado los resultados, somos el socio comercial más importante de Estados Unidos, las tasas de desempleo en los dos países son las más bajas en los últimos años y el empleo es el más alto, y los retos que enfrenta el país como es el caso de la migración, del fentanilo, de las armas que entran a México, existen instrumentos para poderlos solucionar sin que afecten estos fundamentales”, dijo.
Al ver improbable una desaparición del acuerdo comercial T-MEC, identificó un área de oportunidad para solucionar el tema de la movilidad laboral con el capital humano migrante.
“Esta puede ser una gran oportunidad para encontrar instrumentos y figuras que fortalezcan a ambas economías y que por la vía legal puedan llegar estos movimientos migratorios y beneficien a las dos economías”, refirió en relación con la propuesta del próximo presidente de Estados Unidos sobre dotar de visas especiales de trabajo a todos los que estudien algún grado universitario en el país y que México podría retomar.