El despliegue de la red 5G promete una reducción energética de hasta 85 por ciento en comparación con la 4G, marcando un paso clave hacia la sostenibilidad en telecomunicaciones.
Sin embargo, México enfrenta desafíos debido a su rezago en la generación de energías limpias, lo que complica el avance de AT&T, América Móvil y Movistar en su transición hacia cero emisiones para 2040.
Una estación base con red 5G puede consumir hasta 85 por ciento menos electricidad que una similar operando con 4G.
“La sustentabilidad es una buena decisión de negocios para nuestro sector, todos los datos lo demuestran y por eso estamos avanzando para llegar a metas de cero emisiones”, aseguró Daniel Ríos Villa, vicepresidente de relaciones institucionales de AT&T México
En un entorno donde prestar servicios móviles no es barato por el costo creciente de la electricidad, el espectro, los componentes y la demanda creciente de datos de los usuarios, reducir el consumo energético es un imperativo y una forma de hacer más rentable el negocio de las telecomunicaciones móviles.
Pamela Araico, gerente de Sostenibilidad y Responsabilidad Corporativa para Ericsson Latinoamérica explicó los equipos para habilitar tecnologías como 5G tienen capacidad de consumir menos energía sin reducir la calidad en los servicios
“Tenemos productos que consumen 30 por ciento menos energía que generaciones anteriores, y hemos reducido hasta 50 por ciento el peso y tamaño de los componentes de red, sin afectar la experiencia de los usuarios”, comentó la ejecutiva.
La escala del problema es enorme, tan sólo en lo que va de 2025, el sector ya opera más de 7 millones de estaciones base en el mundo. Solo en electricidad, el gasto global asciende a poco más de 25 mil millones de dólares, cifra que representa el 1.4 por ciento del consumo global de energía eléctrica mundial.
Las redes 5G se encuentran en una paradoja, su diseño está pensado para mover cantidades masivas de datos en menor tiempo, impulsar industrias conectadas, habilitar la Inteligencia Artificial (IA) y el Internet de las cosas.
Sin embargo, toda la eficiencia prometida a nivel tecnológico abre la puerta a un mayor consumo de energía si no se integran en la red componentes capaces de reducir el consumo energético.
“Hoy, el 20 por ciento de nuestra red ya opera con energía renovable, particularmente solar, pero seguimos avanzando en nuestras metas para aumentar este porcentaje y llegar a nuestra meta de cero emisiones”, afirmó Ríos Villa.
No obstante, el uso de energías limpias no depende de la voluntad de los operadores móviles, ni de las tecnológicas, depende también de los avances de los gobiernos para descarbonizar su sistema eléctrico.
“Es una combinación de esfuerzos entre los operadores y los proveedores de tecnología como Ericsson, pero depende también en buena medida de los avances que tengan los gobierno en el uso de energías limpias”, explicó Pamela Araico.

Rezago energético en México afecta al sector de telecomunicaciones
México se encuentra rezagado en la generación de electricidad limpia, especialmente en el desempeño de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). A pesar de que, para 2024, alrededor del 31 por ciento de la energía eléctrica total en el país proviene de fuentes limpias, la proporción dentro de la CFE es menor.
A finales de 2024 las energías renovables apenas alcanzaron el 19.7 por ciento en CFE, lejos de la meta de 35 por ciento establecida en la Ley de Transición Energética.
La carrera de AT&T, América Móvil o Telefónica Movistar no es solo por reducir costos, sino por ganar relevancia en una economía digital. Ericsson proyecta que hacia 2029 habrá hasta 50 mil millones de conexiones entre personas, dispositivos, hogares e industrias.
“En ese mundo interconectado, las redes deberán escalar sin disparar sus emisiones; nosotros estamos trabajando y hemos logrado reducir hasta ahora 35 por ciento de nuestras emisiones y tenemos proyectado que para 2040 llegaremos a nuestro objetivo de cero emisiones de carbono”, destacó la directiva de Ericsson.