El corredor mexicano Víctor Nava aseguró haber corrido el Medio Maratón de la Ciudad de México descalzo. Compartió su experiencia y testimonio mediante sus redes sociales y aseguró que hay beneficios al no usar tenis, además de que tampoco se hidrató durante los 21 kilómetros.
“No lleve tenis, no lleve geles, no lleve hidratación, no lleve nada más que lo esencial, mi cuerpo, mi respiración y mi voluntad”, explicó el corredor y creador de contenido, quien revela practicar trail running (carrera de senderos o montañas) y ser coach certificado de ultrarunning (ultramaratón, carreras que superan recorridos de un maratón tradicional).

Fue así como Nava recorrió por la avenida Reforma, y aseguró que lo hizo por una cuestión personal: “no por rebeldía, sino por memoria, para recordar que el humano no necesita tanto para avanzar, solamente necesita lo esencial, estar presente”.
Ante esta proeza, el propio Víctor dejó en claro que “el asfalto no fue amable”, pues las muchas piedras le provocaron grietas en los pies; sin embargo, asegura sentirse mejor consigo mismo luego de esto.
“Ésta no era una carrera para llegar primero, era una para llegar más profundo. Corrí para demostrarme que puedo resistir sin depender de lo artificial. Corrí para inspirarte a ti, a quitarte el exceso y a escuchar tu verdad. Hoy mis pies están marcados, pero mi alma está limpia, no necesito más, estoy completo... soy”, sentenció como parte de la narración de su video.
Ésta no es la primera vez que Víctor reportar una hazaña de este tipo. Lo había hecho, por ejemplo, durante el evento adidas Splits de 16 kilómetros de longitud. En ese entonces, aseguró que ayuda a la postura, reduce lesiones, pero que es un cambio que se debe hacer de manera gradual.
¿Correr descalzo provoca algún daño a la salud? Esto sabemos
Luego del éxito del libro Nacidos para correr de Christopher McDougall, el cual relata en una parte las hazañas de los indígenas tarahumaras o rarámuris de la Sierra Madre Occidental México para correr grandes distancias descalzos o con huaraches, se ha popularizado el barefoot running, es decir, el correr descalzo como una tendencia ascendente entre corredores.
De acuerdo con Matt Klayman, fisioterapeuta y gerente de una clínica en un centro ambulatorio de fisioterapia ortopédica en Chicago, “el correr descalzo ha demostrado mejorar la eficiencia en la técnica de carrera, sobre todo si se combina con ejercicios para fortalecer los músculos intrínsecos del pie”, es decir, 20 músculos de la planta del pie que “ayudan a mantener el arco y ofrecen estabilidad” y que revela que son poco considerados pero claves en la eficiencia del corredor.
“Al quitar el soporte del calzado, se incrementa la estimulación nerviosa en estos músculos, forzándolos a activarse para estabilizar el pie. Esto puede traducirse en un menor riesgo de lesiones a largo plazo”, asegura el exfisioterapeuta de la Asociación Profesional de Squash (PSA).
Sin embargo, asegura que hay un peligro en hacer el cambio de un momento a otro: “correr largas distancias con tenis a hacerlo descalzo puede ser riesgoso”.

“Los tenis modernos tienen una diferencia de altura entre talón y punta (de 8 a 12 mm), lo cual genera un ‘efecto rampa’ que suaviza el impacto. Correr sin este soporte puede generar lesiones como fracturas por estrés o dolor en el talón y el tendón de Aquiles”, explica.
Para poder hacer el cambio, recomienda que sea un cambio muy paulatino con distancias cada vez mayores, con cadencias, hacer otro tipo de ejercicios físicos descalzo, cambiar el calzado por uno con menor altura, fortalecer la cadera y hacer estiramientos de pantorrillas y caderas regularmente.