El avance en la vacunación en California ha permitido relajar las medidas tomadas para combatir el COVID-19 por lo que los trabajadores ya pueden dejar de utilizar el cubrebocas en sus áreas laborales, siempre y cuando hayan recibido previamente la vacuna. La medida se podría implementar tan pronto como esta semana.
La medida fue recibida con beneplácito por Joe Aguilar, empleado en un centro comercial en San Diego, quien platicó que la medida le beneficia, ya que todos los días tiene que subir y bajar escaleras y eso le provoca mayor cansancio, ya que debe cargar diversos objetos y eso le dificulta más la respiración.
“Poco a poco volvemos a la normalidad y eso es bueno’', expresó.
La medida fue aprobada por la Junta de Normas de Salud y Seguridad Ocupacional de California y se contempla que beneficie a miles de trabajadores ya que un 47.4 por ciento de la población mayor a los 12 años ha completado el esquema de vacunación en contra del COVID-19.
La semana pasada, California superó la aplicación de 40 millones de dosis de la vacuna contra el coronavirus en todos sus condados. Asimismo, este estado fronterizo presenta uno de los índices más bajos de contagios en el país.
Hasta el momento, son 25 estados los que han cancelado por completo la obligatoriedad del uso de mascarillas al público en general.
La libertad de trabajar sin el uso de cubrebocas se extiende a diferentes áreas laborales dentro de California, entre ellas las empresas de manufactura, oficinas y minoristas.
En el ámbito laboral, la medida impacta a miles de trabajadores ya que se estima que un 70 por ciento de los adultos en California ha recibido una dosis de la vacuna, pero para poder retirarse el cubrebocas es necesario que tengan su esquema completo.
El gobierno estatal espera que el retiro paulatino de las restricciones para evitar la propagación del COVID-19 favorezca la reactivación económica de California, misma que fue impactada negativamente, sobre todo en las industrias de entretenimiento y hostelería y sus servicios relacionados.
También pueden desarrollar sus actividades sin el uso de este artefacto quienes tienen una afección de salud ya sea mental o una discapacidad que les impida el uso del cubrebocas.
De la misma forma, pueden dejar de emplearlo las personas sordas que requieren leer los labios.
Adicionalmente quedan exentos de utilizar cubrebocas en todo momento los niños menores de 2 años ya que corren el riesgo de asfixiarse al utilizar una máscara que cubra su nariz y boca.