Redacción
Los estudios de Hollywood no han visto ni un centavo de lo ganado por las proyecciones en China desde finales de 2012, pues ésta ha suspendido los pagos debido a una disputa por quién debe cubrir un nuevo impuesto de 2 por ciento.
Pagar el nuevo impuesto, alegan los estudios, violaría un acuerdo de la Organización Mundial de Comercio (OMC) alcanzado el año pasado entre el vicepresidente Joe Biden y el presidente chino, Xi Jinping, explicó The Hollywood Reporter.
La Asociación Cinematográfica de América (MPAA, por sus siglas en inglés) está trabajando para resolver el conflicto, según fuentes con conocimiento del caso citadas por la publicación.
La disputa podría resolverse a través de una queja presentada ante la OMC, pero aún no está claro si ése será al camino que tomarán los estudios.
En otras circunstancias, los estudios no dudarían en retirar sus películas, pero las expectativas son que el mercado chino se convierta en el más grande del mundo en los próximos cinco años.
El acuerdo de la OMC otorgaba a los estudios extranjeros 25 por ciento de los ingresos de taquilla, proporción que antes era de entre 13 y 17 por ciento, y los oficiales chinos establecieron que cualquier pago adicional no saldría de ese porcentaje, pero en otoño pasado algunos funcionarios decidieron lo contrario, explicó The Hollywood Reporter.
Siguiendo esa regla, a Warner Bros. le deberían 31 millones de dólares por las cintas El Hombre de Acero, El Hobbit y Jack El cazagigantes, mientras que a Sony le deberían 23 millones por Skyfall y Después de la Tierra. Otros estudios afectados son Paramount, al que le deben 30 millones por Jack Reacher y las segundas partes de Star Trek y G.I. Joe, y Disney, que por Iron Man 3 debería recibir también 30 millones de dólares.