"Fue la locura. En ese momento uno de mis sueños se volvió realidad y las reacciones en Alemania demostraron que también era algo por lo que los alemanes realmente esperaron durante mucho tiempo", responde por correo electrónico Angelique Kerber, número dos del mundo, sobre la importancia de haber conquistado su primer torneo de Grand Slam en el Abierto de Australia de este año.
Especialmente porque su triunfo se dio ante la mejor del ranking, Serena Williams, y 17 años después de que su compatriota e ídolo de la infancia, Steffi Graf, conquistara por última vez uno de los cuatro grandes del tenis (Roland Garros).
"Lo que más admiré de ella fue su profesionalismo y perfección, además de su carácter amable y reservado", comparte.
Clic. Enviado. El correo se fue de la bandeja de salida. A las 5:59 horas (12:59 en Alemania), extraño por ser sábado y sólo medio día después de hecha la petición para hablar con ella, su agente de prensa (de Arena11 Sports Group, con oficinas en en München, Düsseldorf y Braunschweig) se reporta: Angelique no puede responder vía telefónica, pero sí por mail.
Fecha y lugar de nacimiento: 18 de enero de 1988, Bremen, Alemania
Residencia: Puszczykowo, Polonia
Profesional desde: 2003
Altura: 1.73 metros
Peso: 68 Kilos
Perfil: zurdo
Títulos en singles: 8
Entrenador: Torben Beltz
Ganancias en su carrera: 11,880,743 dólares
Apenas un mes y siete días después del máximo logro en su carrera hasta ahora, previo a su debut en el Masters de Indian Wells, su torneo favorito según su perfil de la WTA, la nacida en Bremen se toma el tiempo para platicar sobre qué pueden esperar de ella sus seguidores para el resto de 2016.
"Voy a seguir dando lo mejor de mí, trataré de seguir divirtiéndome siempre sobre la cancha y jugando mi mejor tenis", asegura.
Fanática de otras disciplinas como natación, futbol, Fórmula Uno, patinaje artístico y handball, se decantó por el tenis a los 3 años y a los 15 se convirtió en profesional. Así, hasta su temporada número 14 en el circuito, con ocho títulos de singles en su palmarés, Angelique Kerber sabe lo que necesita para mantenerse a buen nivel en una era tan competida.
"Se debe dar mucho valor a mantener una buena forma física y alimentación, y trabajar mucho en el aspecto mental, porque el tenis también depende mucho de la cabeza", señala.
"No me presiona la diferencia de puntos en el ranking, pero por supuesto que quiero reducirla con respecto a Serena (3 mil 545) y estar lo más arriba que se pueda".
Sin embargo, para ello deberá aplicarlo de la mejor manera, ya que, después de su victoria en Australia, la jugadora de 28 años llegó como la primera sembrada al Abierto de Doha, en Qatar, donde fue eliminada en la segunda ronda.
Y es que su calendario es complicado. El próximo 16 y 17 de abril, la Selección femenil alemana se enfrenta a Rumania en los playoffs del Grupo Mundial de la Fed Cup y, aunque Angelique puede ser una pieza fundamental para conseguir la permanencia para su equipo, prefiere no pensar si participará, sino concentrarse en su futuro inmediato.
"Eso aún está muy lejos, primero vienen un par de torneos muy importantes en Estados Unidos", dice.