La intención de Netflix de adquirir Warner Bros. Discovery enfrenta obstáculos regulatorios y políticos. Si bien la operación promete consolidar a Netflix como el líder indiscutible del mercado de streaming, las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han encendido las alarmas. Trump señaló que la adquisición podría generar preocupaciones de monopolio, ya que uniría al jugador más grande del segmento (Netflix) con el tercero más importante (HBO), afectando la competencia en el mercado.
A este escenario se suma la oferta hostil presentada por Paramount, que compite directamente con Netflix por Warner Bros. Paramount ha asegurado el respaldo financiero de inversionistas clave, como Affinity Partners, la firma de capital privado fundada por Jared Kushner, y de RedBird Capital Partners y Larry Ellison, quienes garantizan los 40 mil millones de dólares necesarios en efectivo para la oferta. Esta participación de Kushner añade un elemento político al proceso, ya que la administración Trump deberá aprobar cualquier acuerdo, y hay antecedentes de críticas del mandatario hacia CNN, una de las propiedades de Warner Bros.
La combinación de intereses económicos y políticos coloca a Netflix en una posición complicada. Aunque la adquisición de Warner Bros. significaría integrar un catálogo robusto y fortalecer su capacidad de producción, también enfrenta un escrutinio antimonopolio que podría frenar el acuerdo.
Por otro lado, Paramount, con el respaldo de Kushner y otros inversionistas de peso, tendrá que sortear cuestionamientos similares, especialmente sobre la influencia política que podría derivarse si Warner Bros. queda bajo control de aliados de Trump. Esto convierte el proceso en una batalla no solo financiera, sino también estratégica y política que podría tener implicaciones de largo alcance para la industria del entretenimiento.
México lidera en accidentes viales
La plataforma de operaciones conectadas que usa inteligencia artificial para mejorar la seguridad vial y patrimonial de flotas y activos, Samsara, cuya directora de marketing es Brendalí Lopez, dio a conocer su Reporte Global de Seguridad 2025, un análisis basado en más de 90 mil millones de millas recorridas por 2 mil 600 flotas en Norteamérica, Europa y México, que evidencia un reto crítico para la competitividad logística del país: México registra la tasa de accidentes más alta del mundo, un 60 por ciento por encima del promedio global, y un nivel de distracción por celular 238 por ciento superior al de otros países. Estos indicadores impactan directamente en costos, disponibilidad de unidades, primas de seguros y eficiencia en cadenas de suministro que dependen, cada vez más, de seguridad y continuidad operativa.
El estudio también revela un patrón sostenido de fatiga nocturna; 52 por ciento más frecuente que en Europa, maniobras bruscas y conducción a corta distancia, particularmente en operaciones energéticas, industriales y de largo recorrido. Aunque México registra 25 por ciento menos eventos de exceso de velocidad que el promedio global, la combinación de presión logística, infraestructura desigual y dependencia del móvil crea un escenario que obliga a empresas y autoridades a replantear sus estrategias de gestión del riesgo. En comparación, Europa y Canadá mantienen los niveles más bajos de frenado brusco con 44 por ciento menos incidentes.
Empresas clave en el clima
México tiene la meta de reducir un 35 por ciento de sus emisiones de gases de efecto invernadero hacia 2030, como lo anunció la secretaria de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, durante la presentación de la Contribución Determinada a Nivel Nacional 3.0 en la COP de Belém do Pará, Brasil. Alcanzar esta meta requiere transformar sectores clave como transporte, energía, industria y agricultura, lo que solo será posible con la colaboración entre el gobierno y el sector privado.
Durante la inauguración de MiBimbo, el museo interactivo de Grupo Bimbo, Bárcena reconoció los avances de la empresa en sostenibilidad, destacando sus iniciativas en agricultura regenerativa, energías renovables, movilidad eléctrica y reducción de desperdicios. Actualmente, Bimbo opera con más de 300 mil hectáreas bajo agricultura regenerativa, tiene el 94 por ciento de sus empaques reciclables, programas de cero desperdicios, y una ruta definida hacia cero emisiones en 2050.